25 de abril de 2024
25 de abril de 2024 | Las Noticias del Ministerio Público Fiscal
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A raíz de una solicitud de la Dirección General de Espacios Verdes del Ministerio de Ambiente y Espacios Públicos del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires
UFI AMIA: la Unidad Fiscal brindó información al gobierno porteño sobre la situación del terreno donde se volcaron los escombros del edificio de la AMIA
La Unidad Fiscal AMIA brindó precisiones a las autoridades locales sobre la situación del terreno adyacente al Parque de la Memoria, frente al Río de la Plata, donde oportunamente se volcaron escombros del edificio atacado el 18 de julio de 1994, y dio cuenta de la ausencia de restricciones actuales respecto del lugar o los materiales depositados.

La Dirección General de Espacios Verdes explicó que tenía intención de presentar un proyecto de mejora y puesta en valor del terreno adyacente al Parque de la Memoria donde años atrás habían sido depositados los restos del edificio destruido por el atentado de 1994 y solicitó, en consecuencia, información a la unidad sobre su situación. Según indicaron las autoridades, se pretende sumar ese lugar como un nuevo espacio verde, mejorar su conexión con los espacios colindantes y solucionar los problemas de salubridad que actualmente lo afectan.

La Unidad Fiscal informó que la autoridad judicial ya se había expedido en relación con el tema, a partir de dos presentaciones efectuadas entonces por la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires y por la AMIA. La primera había requerido autorización para el vaciado de escombros en ese predio, ante la clausura de la escombrera situada detrás de la Ciudad Universitaria. La mutual judía, por su lado, había pedido autorización para que instituciones comunitarias retiraran de allí materiales, con el objeto de perpetuar el recuerdo del trágico episodio vivido.

El juez entonces a cargo del caso hizo lugar en julio de 1996 al pedido efectuado por la AMIA y autorizó a que esa institución, la DAIA, la OSA, el Superior Rabinato de la Comunidad Judía Argentina y el Ente Coordinador Sefaradí Argentino retiren los restos aludidos. Comunicó dicha decisión a la entonces Municipalidad de Buenos Aires, a la que también autorizó a utilizar el predio para el vaciado de escombros, en la medida en que ello no interfiriera en el retiro autorizado, y con el deber de adoptar las medidas necesarias para que los escombros a depositarse se mantuvieran separados de los que habían sido de la AMIA, hasta que opere su retiro total. De hecho, meses atrás declararon ante los fiscales algunos de los directivos del Instituto Judío de Investigación (IWO) que describieron las tareas que en su momento ellos mismos habían llevado adelante para el recupero de parte del acervo documental y del patrimonio cultural mezclado entre los restos.

En abril de 1997, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires efectuó una nueva presentación, en la que requirió la liberación de todas las restricciones con referencia a los escombros de lo que había sido el edificio de la AMIA, y del predio de la Costanera donde se encontraban depositados y adjuntó a tal fin copias del expediente N° 11.189, del que surgía la referencia a que se trataba de un terreno de relleno, realizado precisamente a partir de los escombros en cuestión. Ante ello, y previo notificar a las partes para que formularan las manifestaciones pertinentes, el juez a cargo dispuso la liberación de todas las restricciones que pesaban sobre los escombros pertenecientes al edificio de la AMIA, como así también sobre el predio de la Ciudad Universitaria donde se encontraban depositados, lo cual comunicó mediante oficio al organismo requirente.

Sin perjuicio de estos antecedentes, la Dirección General de Espacios Verdes del Ministerio de Ambiente y Espacios Públicos de la Ciudad de Buenos Aires efectuó recientemente la nueva consulta ya reseñada. Ante ello, a la luz del tiempo transcurrido y por tratarse de un predio que al día de la fecha permanece cercado, la Unidad Fiscal dispuso que el Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista de la PFA se constituya en el lugar, y establezca sus características actuales. También se encomendó la determinación de su accesibilidad y la reseña de los materiales o elementos allí existentes, como así también la obtención de vistas fotográficas. La inspección ordenada, dio cuenta de la existencia de densos pastizales, de restos de antiguas compuertas en desuso del arroyo Vega, así como restos de pequeño tamaño sobre la costa del Río de la Plata.

En tales condiciones, y a la luz del trámite y del criterio oportunamente adoptado veinte años atrás, se hizo saber a la Dirección General de Espacios Verdes del Ministerio de Ambiente y Espacios Públicos de la Ciudad de Buenos Aires, que no existen restricciones actuales, en el marco de la investigación, para disponer del predio adyacente al Parque de la Memoria ubicado frente al Río de la Plata en la zona norte de la Ciudad de Buenos Aires, o de los materiales allí existentes.