24 de abril de 2024
24 de abril de 2024 | Las Noticias del Ministerio Público Fiscal
Menu
Intervino el fiscal Horacio Héctor Arranz
Chubut: condenaron a dos personas por explotar sexualmente a una mujer
Se trata de Ramón Díaz Soto y Guillermina Del Rosario Mato Adorno, quienes fueron encontrados culpables de la recepción y acogimiento de al menos una joven con fines de explotación sexual. La víctima fue vendida por su prima a un hombre que la mantuvo cautiva mediante golpes y amenazas.

El 13 de agosto, el Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia condenó a un hombre y a una mujer a la pena de tres años y un año y medio de prisión, respectivamente, por considerarlos culpables de la recepción y acogimiento de al menos una una joven con fines de explotación sexual. Además, los jueces ordenaron el decomiso del prostíbulo “Las Brujas”, lugar donde la víctima fue obligada a ofrecer servicios sexuales.

El fiscal General, Horacio Héctor Arranz, había solicitado en sus alegatos, condenar a Ramón Díaz Soto y a Guillermina Matto Adorno a tres años de prisión en suspenso a cada uno por considerarlos coautores de recepción y acogimiento de la joven, mediando abuso, coacción y vulnerabilidad. Asimismo, también había solicitado el decomiso de los locales denominados “Las brujas” y “Oasis”.

La víctima, oriunda de la ciudad de Orán, provincia de Salta, al momento de la denuncia estaba embarazada de 15 semanas. Además, tenía dos hijos y se encontraba sin trabajo. Esa situación de vulnerabilidad hizo más tentadora la oferta laboral que le había ofrecido su prima, pese a la distancia.

La denuncia la realizó la víctima el 26 de febrero de 2012 en la ciudad de Los Antiguos, provincia de Santa Cruz. La mujer relató que fue engañada a través de una falsa oferta de empleo que le había realizado su prima para trabajar como niñera. La joven salteña viajó a Comodoro Rivadavia a mediados de diciembre de 2011. Una vez allí, la esperaba un automóvil gris con vidrios polarizados. Al entrar, su familiar le dijo: “Vos te vas a ir con él, te vas a ir a un prostíbulo a trabajar y estás vendida”. En ese momento, Ramón, el marido de su prima, la tomó de los brazos, mostró un arma, y la llevó directamente al boliche “Las Brujas”. Al llegar, la obligaron a quitarse la ropa y a realizar un “pase”.

La víctima también detalló que Ramón le alquilaba la habitación que compartía con otras cinco mujeres, de entre 14 y 15 años, que también habían sido captadas y vendidas. La víctima contó que le pedía ayuda al dueño de la habitación pero éste le respondía que no podía hacer nada. Las mujeres siempre estaban custodiadas por dos personas armadas, no tenían lugar en el colchón, solo sábanas para taparse, la comida era escasa y les daban pastillas para dormir y droga en el horario de trabajo.Las víctimas eran obligadas a prostituirse bajo amenazas.

Finalmente, logró escapar y pidió ayuda a la policía. Sin noticias de la joven, la madre se comunicó con su sobrina, quien le había realizado la falsa oferta laboral en su momento, le dijo que se había escapado de su casa en Comodoro Rivadavia y que no sabía dónde estaba.

Posteriormente, la madre de la víctima realizó la denuncia en Salta por el paradero de su hija. Sin embargo, un policía dio aviso a los proxenetas del posible allanamiento debido a la denuncia radicada en Orán y éstos decidieron escapar con las víctimas que tenían cautivas. La pareja obligó a las mujeres a que tomaran una pastilla para dormir pero la denunciante logró no hacerlo sin que nadie lo notara. Cuando el vehículo se detuvo en la ciudad de Los Antiguos para comprar alimentos, la joven aprovechó el descuido y escapó. La persiguieron y se subió a un auto negro, cuyo la ayudó, pero no quiso llevarla a Comodoro porque no tenía su DNI. (sólo contaba con la partida de nacimiento). La llevó a un hotel y le dio dinero para pagar la noche, se alojó, se cambió de ropa y se dirigió a radicar la denuncia.

Los hechos

La víctima, una vez que arribó a Comodoro Rivadavia, constató que el trabajo era en un prostíbulo, donde la encerraron y sometieron contra su voluntad a ejercer la prostitución y le quemaron sus pertenencias, ropa, DNI. Además, le cortaron el cabello con la finalidad de cambiar su aspecto, le impidieron mantener contacto con el exterior y era trasladada a diferentes lugares en vehículos en Comodoro Rivadavia.

Por otra parte, la joven, quien estaba embarazada de 15 semanas al momento de realizar la denuncia, relató que los proxenetas se encargaban de practicarles los abortos al resto de las chicas, algo recurrente ya que no las proveían de preservativos ni de ningún otro método anticonceptivo.

Del relato de la víctima, también se desprende que las mujeres habrían intentado escapar en varias oportunidades pero, debido a la complicidad policial con los proxenetas, se vieron frustrados.

En una oportunidad, Ramón, al enterarse de uno de los intentos de fuga de las mujeres, las golpeó de muy mala manera para que no lo volvieran a hacer. Además, el hombre les dio plata a los policías mientras ellos se reían de ellas porque las conocían debido a que varias veces habían hecho pases en el local con ellas,