El titular de la Fiscalía Federal de Primera Instancia de San Ramón de la Nueva Orán, José Luis Bruno, solicitó la elevación a juicio de la investigación seguida contra Wilson y Edward Miranda, en orden al delito de contrabando de importación de estupefacientes en grado de tentativa, luego de que fueran sorprendidos con 63,107 kilos de cocaína y pasta base.

Alrededor de las 10.45 hs. del 20 de febrero pasado, llegó a la Zona Primaria Aduanera del Puente Internacional Aguas Blancas una camioneta Toyota que provenía de la ciudad boliviana de Santa Cruz de la Sierra. En el vehículo, que era conducido por Wilson Miranda, viajaban Edward Miranda, Marlene Miranda y una niña. Al ser interrogados por el motivo del viaje, los imputados refirieron que se dirigían en un viaje familiar hacia Buenos Aires.

Al realizar el control de rutina, se detectó debajo del guardabarros derecho, en el baúl de la camioneta, una cavidad de chapa con pintura irregular, por lo que se trasladó el vehículo al sector de la fosa del Puente Internacional, donde personal de Gendarmería lo inspeccionó. Así, en distintos compartimientos se encontraron 82 paquetes envueltos en papel film y grasa, los cuales fueron analizados y arrojaron un pesaje total de 63,107 kilos de clorhidrato y pasta base de cocaína.

En base a las pruebas colectadas, el fiscal Bruno consideró que Wilson y Edward Miranda debían ser sometidos a juicio oral y público como coautores del delito de contrabando de importación de estupefacientes en grado de tentativa. En tal sentido, consideró que “el ocultamiento del estupefaciente en cavidades ocultas (…) al momento de ingresar a la localidad de Aguas Blancas (Argentina) provenientes del Estado Plurinacional de Bolivia tratando de burlar el control de las autoridades de Aduanas y Gendarmería Nacional, para introducir el estupefaciente en territorio argentino, constituyó un ardid hábil ideado para intentar burlar el control de la fuerza de prevención”.