29 de marzo de 2024
29 de marzo de 2024 | Las Noticias del Ministerio Público Fiscal
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Una medida que discrimina y revictimiza
Santa Fe: fiscales se oponen a examen de credibilidad para una víctima de trata
El Tribunal Oral Federal de la provincia de Santa Fe solicitó realizar un "estudio de personalidad" a una joven menor de edad, víctima del delito de trata y abuso sexual, que estuvo capturada dos semanas en un pequeño pueblo de la provincia.

En la provincia de Santa Fe tramita actualmente un juicio oral por el caso de una joven de 17 años de edad, víctima de los delitos de trata de personas con finalidad de explotación sexual y abuso sexual reiterado, que al momento de los hechos tenía 15 años.

La historia que describe los tormentos a los que esta joven víctima y testigo estuvo sometida durante dos años no parece suficiente para el Tribunal Oral Federal de la provincia, compuesto por José María Escobar Cello y María Ivón Guadalupe Vella, que solicitaron se le practique a la víctima un “estudio de personalidad” atendiendo un pedido solicitado por el defensor de uno de los imputados. Esta práctica pretende establecer, entre otras cosas, las características de la personalidad de la joven, su nivel de compromiso y de responsabilidad por sus palabras, afirmaciones y respuestas, la tendencia a manifestarse con veracidad y a la fabulación.

De este modo, el tribunal sostuvo que "el resultado de los estudios de personalidad y examen psicológico dispuestos, constituirán un importante elemento de valoración tanto para las partes como para el Tribunal, que, sin perjuicio del ejercicio de la sana crítica, sumado a los exámenes médicos obrantes en autos como así también el contenido de la cámara gesell (...) lejos de constituir una situación de revictimización- procurará no sólo una visión integral de la problemática y vulnerabilidad de la víctima, sino también la eventual necesidad de su asistencia psicofísica. De la misma forma ayudará a evaluar cuales han sido los recursos con que la víctima ha exteriorizado su vivencia y las circunstancias que habrían rodeado a los hechos, lo que orientará y facilitará la reconstrucción histórica del hecho llevado a juicio y determinación de la verdad, principio rector del derecho penal.”.

El fiscal Martín Suárez Faisal presentó un recurso de casación para impedir que se concretara el estudio, pero el TOF de Santa Fe entendió que el recurso no era admisible. Ante esta denegatoria, Faisal conjuntamente con el fiscal Marcelo Colombo, titular de la Procuraduría de Trata, presentaron un recurso de queja ante la Cámara Federal de Casación Penal.

El Ministerio Público centró su oposición en tres argumentos. En primer lugar, sostuvo que realizar el "estudio de personalidad" a la joven, atentaría contra su integridad física y psíquica de manera innecesaria en virtud de las múltiples intervenciones psicológicas y médicas anteriores a las que ya se la había sometido a lo largo del proceso. Los fiscales consideraron además que la medida era impertinente, ya que es facultad de las partes -al momento de formular sus alegatos- y de la judicatura interviniente -al dictar sentencia-,  evaluar la veracidad de los testimonios y del resto de las pruebas, en búsqueda de la verdad que debe imperar en todo proceso penal. Finalmente, el tercer agravio se vinculó al potencial revictimizante que esta medida puede tener sobre la joven, quien ademas aún continúa siendo menor de edad.

Por último, los fiscales agregaron que “su utilización, debe ser también rechazada por ser una práctica discriminatoria contra la mujer, si se tiene en cuenta el impacto diferencial que una medida así tiene sobre las mujeres respecto de los varones". En este sentido, el Ministerio Público considera que la medida judicial que se cuestiona sólo encuentra fundamento en un estereotipo ilegítimo acerca del rol de las mujeres en la sociedad, al que el Estado Argentino se comprometió a  erradicar adoptando entre otras medidas, la ratificación de la Convención para la Erradicación de toda forma de Discriminación contra la Mujer,

De esta forma se argumentó que pretender someter a la víctima testigo a un examen psicológico y de la personalidad para dar cuenta de su credibilidad, es una manifestación clara de un preconcepto por parte de los integrantes del tribunal, ya que coloca a una víctima joven mujer en la posición de dar especial cuenta de la calidad de su relato.

Se sostuvo que “curiosamente, este tipo de peritajes no se realiza sobre víctimas de robo, por ejemplo, o de otro tipo de delitos, sino en el marco de investigaciones de delitos que tienen como principales víctimas a las mujeres –como son los abusos sexuales o delitos contra la integridad sexual. Dicho esto, no se puede descartar que esta práctica responda a cierto prejuicio que hay respecto del testimonio de las mujeres víctimas de delitos en general, y de las víctimas de violencia sexual en particular.

La historia del caso

En septiembre de 2010, la madre de una joven de 15 años, realizó la denuncia, en una comisaría de la provincia de Santa Fe, por la desaparición de su hija. Dos semanas después, y luego de ser rescatada, pudo conocerse que la chica había sido captada por otra mujer también menor de edad, que pretendiendo una amistad y engañándola a la salida de un lugar bailable, la condujo hasta un supuesto remís y una vez arriba del vehículo, le dio de tomar una bebida que le hizo perder el conocimiento.

El hombre que conducía el automóvil las llevó hasta un rancho ubicado en la localidad de San José del Rincón, dentro del terreno que pertenecía al domicilio de una mujer que vivía junto a sus hijos y ofrecía los servicios sexuales de otras chicas que también se encontraban cautivas. Ya en el lugar, la joven fue encadenada, encapuchada y drogada y permaneció totalmente privada de su libertad.

El hijo de la dueña del rancho se encargaba de golpear a la joven y de asegurarse el trato con los clientes, al mismo tiempo que impedía el contacto con las otras chicas secuestradas. Además, a la organización se sumaban el novio de la captora y un funcionario policial. Ambos colaboraban manteniendo las condiciones de privación de la libertad y sometían a la víctima a abusos sexuales.

Los imputados en la causa

La causa se encuentra en etapa de juicio oral y los acusados son: la mujer que junto a su hijo coordinaban el lugar de alojamiento de las víctimas, el hombre que conducía el supuesto remís, la mujer que engañó a la joven, su novio, y el funcionario policial.

Todos están acusados como autores del delito de Trata de personas, menor de 18 años de edad, con fines de explotación, agravado por tratarse de tres personas o más en forma organizada, y especialmente agravado en el caso de policía, el que además, junto al novio de la captora, estan procesados por el delito de abuso sexual agravado.

Qué se espera

Ahora, con el recurso presentado por los fiscales Suárez Faisal y Colombo, se espera que la Cámara resuelva y haga lugar a la queja. En el petitorio, los fiscales también solicitan la reserva del caso federal en el hipotético caso de que no se hiciera lugar al recurso de queja interpuesto, ya que afirman se está frente a la posible afectación de las garantías constitucionales de defensa en juicio y debido proceso.