El titular de la Fiscalía Federal N°1 de Lomas de Zamora, Leonel Gómez Barbella, y el fiscal a cargo de la Procuraduría de Narcocriminalidad de la Procuración General de la Nación (Procunar), Diego Iglesias, solicitaron la elevación a juicio de tres imputados, dos de ellos por tenencia de estupefacientes con fines de comercialización en la localidad de Ezeiza y la Villa Zavaleta de la Capital Federal, y el tercero por tenencia simple de estupefacientes. Si bien los tres casos son escindibles entre sí, la Sala II de la Cámara Federal de Apelaciones de La Plata dispuso que el trámite e investigación se desarrolle de manera conjunta.
La pesquisa se había iniciado a partir del testimonio de un hombre cuya identidad fue resguardada que declaró que, para comprar cocaína, fue a ver a un tal Juan Carlos en la localidad de Carlos Spegazzini, en el partido de Ezeiza. Según la declaración, el acusado no le vendió droga, pero lo contactó con una persona ubicada en el asentamiento conocido como Villa Zabaleta de Capital Federal, para concretar la operación. A partir de este testimonio, el juez designó a la Delegación Distrital Antinarcóticos de Ezeiza de la Policía de la Provincia de Buenos Aires las tareas investigativas en los domicilios denunciados.
Después de una serie de investigaciones que incluyeron vigilancias encubiertas y registros fílmicos, se procedió a realizar allanamientos en Carlos Spegazzini y otros dos en Capital Federal el 3 de diciembre del año pasado. En Ezeiza, la Policía decomisó 880 gramos de cocaína y otros 2195 de sustancias de corte para rebajar la sustancia, junto con una carabina calibre .22 mm con un cargador colocado y 84 cartuchos sin utilizar. En los operativos realizados en Villa Zavaleta, en cambio, se incautaron 7380 gramos de marihuana del domicilio de uno de los acusados y de su auto, y 90 gramos de clorhidrato de cocaína de la segunda vivienda.
Al momento de prestar declaración indagatoria, dos de los detenidos se identificaron a sí mismos como consumidores de sustancias, un argumento que no pudo condecirse con la gran cantidad de estupefacientes encontradas en su poder. El tercero, por su parte, argumentó que contaba con una gran cantidad de remedios de venta libre que compraba en una veterinaria de San Isidro y que eso fue lo que se le incautó y no cocaína.
Ante este escenario, los representantes del Ministerio Público Fiscal solicitaron al titular del Juzgado Federal N°1 de Lomas de Zamora, Alberto Santa Marina, la elevación a juicio de dos detenidos con la calificación de delito contra la salud pública por tenencia de estupefacientes con fines de comercializació0n (artículo 5 inciso C de la Ley 23.737) por la cantidad de tóxicos secuestrados, las sustancias de estiramiento encontradas, la forma en que se encontraban ocultas y la manera en la que estaban distribuidas para su posterior comercialización. En el caso del imputado con posesión del arma pesa también la figura de conducta contra la seguridad pública (artículo 189 bis inciso 2 del Código Penal) ya que no figuraba registrado como legítimo usuario de armas de fuego ante el RENAR.