14 de diciembre de 2025
14 de diciembre de 2025 | Las Noticias del Ministerio Público Fiscal
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El crimen ocurrió en junio de 2013
Angeles Rawson: continúa el debate
En la décimotercera audiencia del juicio declararon ocho testigos, entre los que se encontraban policías de la División Delitos contra la Salud de la Policía Federal. Intervienen los fiscales Fernando Fiszer y Sandro Abraldes.

El Tribunal Oral Criminal N°9 escuchó, en primer lugar, al comisario inspector Roque Alamo, de la Superintendencia de Policía Científica de San Martín. El efectivo estuvo en el Ceamse el 11 de junio de 2013, cuando fue hallado el cuerpo de Angeles Rawson en una de las cintas de reciclaje. Explicó que las manos de la joven fueron cubiertas con sobres de papel madera para preservar posibles pruebas y describió como fue hallada la víctima.

El subcomisario Roberto Yantorno se también se desempeñaba en la Superintendencia de Policía Científica de San Martín. Afirmó que es accidentólogo y que fue convocado al Ceamse el día que encontraron el cuerpo de la joven. Indicó, también, que fue el perito el que realizó la preservación de las manos y que el segundo jefe de la Policía tomó las fotografías. Los jueces Fernando Ramírez, Ana Dieta de Herrero y Jorge Gettas les exhibieron a ambos fotografías tomadas el 11 de junio en el Ceamse, por lo que la sala de audiencia fue desalojada en dos ocasiones. También, se exhibió una filmación dentro de la morgue, donde se observa cómo sacan los sobres de las manos de la víctima cuando procedieron a tomar las muestras de ADN. El único acusado por el crimen, Jorge Mangeri, no participó esta vez de la audiencia.

Luego de estos testimonios, fue el turno de declarar de los policías que trabajaban en la División Delitos contra la Salud de la Policía Federal. El primero de ellos fue Julio César Soria, un principal que explicó que no hace trabajo “de calle” y que fueron otros dos agentes los que participaron de lo relacionado con la causa. El siguiente, Héctor Luis Rossi, quién se encargó de acompañar el traslado del cuerpo desde el Hospital Ramón Carrillo hasta la Morgue Judicial, en la ciudad de Buenos Aires.

Indicó que, desde el momento que retiraron el cuerpo desde el centro de salud (donde le mostraron que pertenecía una joven de sexo femenino) hasta que se entregó el cuerpo en la morgue, siempre estuvo en custodia. El otro oficial que estuvo relacionado con el operativo del Ceamse fue Carlos Alberto González, que fue a retirar a la Comisaría 5° de San Martín el sumario que se labró allí. También, retiró de Policía Científica las constancias de lo que se actuó en el lugar y unas bolsas con lo secuestrado en el procedimiento.

Daniel Alejandro Fernández fue quién trabajaba en la Morgue Judicial en el momento en que fue trasladado el cuerpo de Ángeles. Explicó como funciona normalmente el ingreso de los cuerpos y la asignación de los turnos de autopsia. Además, detalló cómo se completa la planilla de ingreso y sus correspondientes observaciones. Por otra parte, Marcelo Ribe era el sargento que conducía el camión morguera. Argumentó que estuvo tan sólo diez minutos en el Hospital Carrillo, donde retiró el cuerpo, y que lo trasladó hacia la Ciudad de Buenos Aires. Indicó que no hace trabajo administrativo, por lo que se quedó dentro del vehículo mientras los efectivos de la División Delitos contra la Salud hacían el ingreso.

Facundo Reyes fue testigo del allanamiento en el sótano de Ravignani 2360 y en la casa del encargado del edificio. Recordó que la Policía Científica le iba señalando las cosas que lo encontraban y que se acuerda de “unos cabellos hallados y un par de materiales más”. Sobre el allanamiento a la portería, luego de la exhibición de su declaración, recordó que había ingresado por una ventana ya que la puerta estaba cerrada y que lo hizo junto con el juez de la causa. Agregó que habían encontrado una mancha en el auto de Mangeri, aunque él no estuvo durante todo el allanamiento.

Luego de la declaración, a Reyes se le exhibió el video del allanamiento del sótano, en donde reconoció tanto los cabellos como las sogas secuestradas y unas manchas de agua en el suelo, como si el suelo hubiese sido baldeado.

El juicio continuará el próximo miércoles 29 de abril, con la declaración de más testigos.