El Tribunal oral en lo Criminal Federal de Paraná condenó a dos hombres por encontrarlos coautores del delito de Trata de personas. Se trata de Sergio Raúl Cardozo y Antonio Gabriel Nonino quienes recibieron la pena de 5 y 3 años de prisión, respectivamente, por engañar a dos jóvenes, una de ellas menor de edad, a través de una falsa oferta laboral y mantenerlas cautivas para explotarlas sexualmente.

Además, se pudo constatar que los explotadores suministraron gratuitamente estupefacientes las víctimas.

El fiscal de la causa, José Ignacio Candioti, había pedido al TOF que las dos mujeres declararan en Cámara Gesell, solicitud que fue concedida y que contribuyó a brindar contención a las víctimas.

La denuncia se realizó el 13 de abril de 2011, cuando la comisaría 1° de Chajarí recibió un llamado anónimo alertando sobre la situación de dos mujeres que se encontraban alojadas en la habitación de un hotel y que estaban siendo obligadas a permanecer allí bajo amenazas, habiéndoles suministrado estupefacientes.

Como consecuencia, la policía arribó al lugar y encontró a las víctimas en una de las habitaciones quienes relataron que habían sido llevadas al lugar por parte de Cardozo, apodado “Tito”, y que habían sido contratadas por él para ejercer la prostitución. Además, detallaron que estaban bajo amenaza y que el explotador les suministraba cocaína.

Luego, arribó Cardozo al hotel y junto a las dos mujeres se dirigieron a la comisaría donde debieron ampliar sus declaraciones.

En dicha dependencia policial, las víctimas relataron que habían arribado a la ciudad de Chajarí el 12 de abril de 2011. Ambas procedentes de la ciudad de Paso de Los Libres, ubicada en la provincia de Corrientes, contaron que fueron recibidas por Cardozo quien era conocido de una de ellas y quien les había prometido trabajo. Detallaron que fueron llevadas hasta un departamento donde quedaron alojadas, encerradas bajo llave.

Ese mismo día, las víctimas, junto a Cardozo y Nonino fueron hasta el bar “Comas”, lugar en el que consumieron cocaína que les suministró “Tito”. Allí, Cardozo les volvió a reiterar que quería que trabajaran para él ejerciendo la prostitución y que les daría un porcentaje del dinero que ganaran. Luego les manifestó que no podían hospedarse en el departamento en el que había estado porque se encontraba ocupado y les pidió que pernoctaran en otro lugar, llevándolas y alojándolas finalmente en la habitación Nº 303 del Hotel Caribe II, lugar en el que consumieron marihuana, alcohol y cocaína que les suministró nuevamente Cardozo.

Antes de retirarse del hotel, Cardozo les dijo que no podían abandonarlo hasta que él regresara y que les iba a conseguir clientes para que “trabajaran”.

Ante tal situación, una de las víctimas se contactó con una conocida a través de mensajes de texto y le solicitó que las fuera a buscar, siendo esta última persona quien finalmente dio aviso telefónico a la Comisaría de Chajarí.

En virtud de ello, la Policía de Entre Ríos solicitó al Juez Federal de Concepción del Uruguay que se librara orden de allanamiento para la habitación Nº 303 del Hotel Caribe II, lugar en el que se encontraban las víctimas.

En dicho procedimiento se secuestraron restos de cocaína y marihuana encontrados en la habitación del hotel, así como en el bolsillo de los pantalones de Cardozo y en el departamento en el que estuvieron alojadas previamente.

En la audiencia plenaria estuvo presente el fiscal José Ignacio Candioti quien acusó a Cardozo como coautor del delito de captación y acogimiento de una persona mayor de 18 años y de una persona menor de edad con fines de explotación sexual, en concurso real con la autoría del delito de suministro gratuito de estupefacientes para consumo personal agravado por ser en perjuicio de una persona menor de 18 años y con la autoría del delito de tenencia simple de estupefacientes .

El titular de la acción penal pública comenzó su alegato crítico afirmando que, a su criterio, durante el transcurso del debate se había acreditado de modo suficiente el hecho descripto en la pieza requirente que abrió el plenario.

Canditoti, sostuvo que está acreditado todo lo que habían relatado las dos mujeres y destacó que el suministró de estupefacientes y las amenazas para que no abandonaran el lugar, generó en las víctimas una situación de vulnerabilidad, alojadas en un lugar desconocido, lejos de la ciudad, sin dinero y sin sus pertenencias, a lo que se sumó el temor que sintieron, en razón de lo cual una de ellas se comunicó con una amiga pidiéndole auxilio.

Asímismo, destacó que los hechos relatados se encuentran avalados por prueba documental y testimonial. Además, indicó que el informe practicado por la psicóloga Bianchini de la Oficina de Rescate da cuenta de las amenazas e intimidaciones padecidas por las víctimas.

Finalmente, el fiscal calificó las declaraciones de sendas víctimas como claras, precisas y coherentes, cuyo relato valoró corroborado por la restante prueba reunida, en especial en sus aspectos controvertidos: el suministro de estupefacientes, el ofrecimiento de conseguirles clientes para el ejercicio de la prostitución y las amenazas e intimidaciones que sufrieron.

Con fundamento en ello, al momento de individualizar la pretensión punitiva del MPF solicitó una pena de seis años para Cardozo y una peña de 4 años y seis meses para Nonino.

Por último, pidió que se dispusiera la prisión preventiva de los acusados hasta que se dictara la sentencia ya que mantener la libertad ambulatoria de los procesados configuraría un riesgo para la seguridad de las víctimas por la posibilidad de que encaren alguna represalia contra ellas.

Finalmente, el Tribunal oral en lo Criminal Federal de Paraná decidió condenar a los dos imputados, pero permanecerán en libertad hasta que se firme la sentencia.