29 de marzo de 2024
29 de marzo de 2024 | Las Noticias del Ministerio Público Fiscal
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Sentencia en un caso de violencia en el fútbol
Condenaron a prisión perpetua a uno de los asesinos de Gonzalo Acro
Los jueces siguieron los argumentos de la fiscal Dafne Palópoli y sentenciaron a la pena máxima a Sergio Piñeiro por el crimen del hincha de Ríver.

En línea con lo solicitado por la fiscal Dafne Palópoli, el Tribunal Oral en lo Criminal Nº15 consideró a Sergio Piñeiro “coautor” de los delitos de “homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o mas personas” en concurso real con “homicidio agravado por concurso premeditado de dos o más personas en grado de tentativa”. Los jueces, además, confirmaron la absolución del otro acusado.

En lugar de realizar la habitual lectura de la parte dispositiva del fallo, el presidente del Tribunal, Adrián Martín, realizó una exposición de los puntos que llevaron a los jueces a condenar al imputado. En dialogo con Fiscales, Palópoli dijo: “Destaco el ejercicio democrático de adelantar los fundamentos de manera clara y didáctica, ya que así resulta accesible tanto al justiciable como a cualquiera que quisiera conocer el razonamiento de un Tribunal”. Los fundamentos en su totalidad se conocerán el próximo martes a partir de las 15:30.

Si bien para los jueces quedó acreditada la participación de Piñeiro en la muerte de Acro, hubo una disidencia parcial en el monto de la pena. Los jueces Darío Medina y Beatriz Bistue de Soler consideraron que la prisión perpetua se ajustaba a la Constitución Nacional, ya que es “temporalmente determinable”. Martín, por otra parte, consideró que es inconstitucional.

Piñeiro fue acusado de participar en la “emboscada” que una parte de la “barrabrava” del club River Plate realizó contra Gonzalo Acro el 7 de agosto de 2007. Ese día, alrededor de las 23:00, la víctima salió de un gimnasio ubicado en Pedro Rivera 5158, en Villa Urquiza. Junto con Gastón Matera, se dirigió hacia donde estaba estacionado su auto Peugeot 206 cuando fue interceptado por Ariel “el Colorado” Luna, quién le disparó en la cabeza y en la pierna. Piñeiro, junto con Pablo Girón, fueron quienes avisaron al otro grupo de la salida de Acro del gimnasio.

Más allá de las dificultades que hubo a lo largo del juicio, por ejemplo la imposibilidad de utilizar los testimonios y las pruebas del primer juicio realizado por el crimen de Acro, la fiscal se mostró conforme con la sentencia. “Se logró probar lo que la Fiscalía expuso en su alegato y la reconstrucción que realizó”, expresó. El primer debate por el crimen, realizado en 2011, fueron condenados a prisión perpetua los hermanos Alan y William Schlenker; Rubén Eduardo Pintos; Pablo Alfredo Girón, y Ariel Luna. En tanto que Martín Maximiliano Lococo recibió la pena de diez años de cárcel por ser partícipe secundario.

Piñeiro y Matías “Kevin” Kraft habían quedado afuera del primer debate judicial por diversas razones: el primero sufrió un “pico de stress”, mientras que Kraft estaba prófugo. Con respecto a Kraft, el Tribunal confirmó el pedido de absolución que había realizado la representante del Ministerio Público: “Por ser una decisión lógica y fundada, al Tribunal no le quedaba más que absolver al imputado”. No obstante, Kraft sigue detenido, acusado de participar en ocho “salideras bancarias”. Piñeiro, quién había dado sus últimas palabras al Tribunal durante la mañana, no estuvo presente durante la exposición del juez.

Adelanto de los fundamentos

El presidente del Tribunal expuso, al comienzo, que los informes telefónicos eran los datos “más objetivos” de la causa y que tenían una mayor valoración en relación a los testimonios recolectados en el expediente. Con respecto a los testigos, aclaró que varios de ellos “no fueron demasiado precisos” y que “esa desmemoria era a veces llamativa”.

Tal como lo expuso la fiscal Palópoli en el debate, el juez Martín describió la situación en la que se encontraba la “barrabrava” de River antes de que se cometiera el crimen: “No hay dudas de que había una disputa interna dentro de la barra y que el enfrentamiento era entre la facción que respondía a Alan Schlenker y la comandada por Adrián Rousseau”.

Esas disputas, explicó el juez, estaban relacionadas con el liderazgo dentro de la barra y, por lo tanto, con el manejo del negocio y poder que esto generaba. Destacó dos hechos en la “escalada de violencia” que hubo antes del homicidio: “la batalla de los quinchos” y “la batalla del playón”. La fiscal había expuesto durante su alegato la posibilidad de que la dirigencia del club hubiera tenido conocimiento de lo que iba a suceder en esta última “batalla”. En ese mismo sentido, el magistrado dijo: “El grupo de Rousseau podría haber contado con la anuencia, complacencia o apoyo de alguna parte de la dirigencia de River”.

Para el Tribunal, quedó acreditado que Piñeiro tuvo un aporte indispensable en el plan que se configuró para matar a Acro. Martín explicó que uno de los elementos centrales contra Piñeiro fueron las llamadas realizadas ese día, especialmente las que tuvo con Girón. Detalló que entre el 7 de julio y el 7 de septiembre, según los informes que constan en la causa, Piñeiro se comunicó con “Cuca” solamente los días 6, 7, 8, 9 y 10 de agosto y que el día del crimen hubo cuatro llamadas. Destacó, además, la ubicación de los celulares durante el día del hecho y como los aparatos activaron antenas cercanas en los mismos horarios.

Derribó, tal como había manifestado la fiscal, el argumento de la defensa sobre la participación del auto de otro “barra” de River en el hecho. Alejandro "Balá" Etcheverry, quién falleció en 2009 y tenía falta de mérito en la causa, fue el señalado por el defensor de Piñeiro como el real titular del auto que observaron los testigos, quienes mostraron disidencias sobre el color y el modelo que se encontraba en la escena. Para los jueces, “los desafortunados interrogatorios” a los que fueron sometidos algunos de los testigos durante la instrucción “agregaron datos a la memoria del testigo que en realidad no fueron percibidos.