Esta mañana, el juez Sebastián Casanello abrió las puertas de la Sala B de los Tribunales de Comodoro Py para celebrar el segundo día de audiencia en el juicio por inteligencia ilegal a periodistas y dirigentes políticos, entre otros, realizada en la Base Almirante Zar de Trelew. El entonces jefe de la Armada Argentina Jorge Godoy y el ex vicealmirante Benito Rotolo son los dos imputados, quienes habrían violando las leyes de Defensa Nacional, de Inteligencia y de Seguridad Interior.
Fue una audiencia particular: los testigo Mauricio Alberto Pasti y Mauricio Damián Zabala declararon por videoconferencia. El primero de ellos es analista en sistemas y fue el encargado de peritar la información que se recolectó de las computadoras secuestradas. Mauricio Zabala es comisario de la Policía de la Provincia de Chubut y el 20 de marzo de 2006 colaboró en el allanamiento realizado a la Base Almirante Zar.
Por su parte, Pasti refirió que llevó adelante el análisis de diez computadoras y destacó que la tarea que le adjudicaron tenía que ver con la localización de documentos importantes, para luego imprimir su información. Tanto Pasti como Zabala fueron testigos propuestos por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), que participa como querellante en la causa, y por la Fiscalía.
El ex viceministro de defensa Jaime Garreta detalló aspectos de la Ley de Defensa Nacional y del el Plan Básico de inteligencia de 2005. Sobre las tareas de inteligencia, recordó que "no se puede hacer inteligencia a ciudadanos por su raza, su credo, su posición política”.
Asimismo, resaltó que “Godoy siempre hablo de la democratización de las fuerzas" y que "tenia una mirada democrática”. Y agregó: “En mi apreciación personal, la actividad del ex almirante fue correcta. No me consta que Godooy haya tenido vinculación con este tema”.
Sobre la cuestión de la “democratización de las Fuerzas Armadas” Garreta explicó que “la Armada durante el proceso tuvo una participación ideológica muy activa, por eso es difícil encausar a la armada en un proceso democrático”.
José Eduardo Demaría también se presentó este mediodía para declarar en carácter de testigo ante el juez Casanello. Durante 42 años estuvo en servicio de las Fuerzas Armadas y 10 años trabajó en inteligencia del Ejército. La Fiscalía, representada por el fiscal Fernando Gelvez, y la querella iniciaron la ronda de preguntas. Demaría declaró por más de dos horas y en la primera parte de su relato también brindó detalles sobe el Plan Básico de Inteligencia Naval de 2005 y sobre la ley de Defensa Nacional y de Seguridad Interior.
Pero también respondió preguntas vinculadas a las estructuras jerárquicas que regían dentro de las fuerzas, en general, y detalló, durante buena parte de su relato, en qué consistía el ciclo de inteligencia y fundamentalmente cómo se transmitía la información dentro de ese ciclo.
Tanto a Godoy como a Rotolo se les imputa haber impartido y retransmitido órdenes o instrucciones a sus subalternos para que realicen prácticas de inteligencia de modo “expresamente” vedado en la ley de Inteligencia Nacional y en los organismos de inteligencia militar.
Las audiencias continuarán mañana a las 10:00. Se esperan los testimonios de otros cinco testigos. Los alegatos del fiscal Gelvez están previstos para la semana que viene.