El Tribunal Oral Federal de Corrientes condenó a Maximiliano Esteban Gómez a ocho años de prisión por el transporte de 6176 kilos de marihuana escondidos en 7202 paquetes ocultos debajo de un cargamento de piedra triturada tipo "polvo", hallados por Gendarmería Nacional en un semirremolque inspeccionado en un control vehicular cerca de la localidad correntina de Santo Tomé. En tanto, los jueces Víctor Antonio Alonso, Fermín Amado Ceroleni y Lucrecia Rojas de Badaro absolvieron a Josué Maximiliano Gómez, quien también viajaba en el camión pero no pudo demostrarse que estaba al tanto de la estiba ilegal. En sus alegatos, el titular de la Fiscalía General ante el TOF, Carlos Adolfo Schaefer, había solicitado 10 años para el acusado ahora condenado y también eximir de responsabilidad penal al acompañante.

El 17 de abril de 2015, cerca de las 4:30, efectivos del Escuadrón 57 "Santo Tomé" de Gendarmería Nacional Argentina detuvo en un puesto emplazado en la Ruta Nacional 14, a la altura del paraje conocido como "Cuay Grande", a un camión marca Mercedes Benz con semirremolque para revisar la documentación. En el vehículo, viajaban dos adultos y un joven de 19 años, quien resultó ser el hijo del conductor, quien además explicó que el otro acompañante se había sumado al recorrido cerca de Ituzaingó, donde "estaba haciendo dedo".

Luego de solicitar la documentación de rigor para identificar el camión, el semirremolque y la carga, los uniformados revisaron la piedra molida y descubrieron una "considerable cantidad de bolsas con envoltorios, que despedían un olor similar al de la 'marihuana'". La inspección final fue realizada en la sede del Escuadrón de la fuerza de seguridad federal, donde los encargados del procedimiento concluyeron que "era poca la piedra molida" y que "la mayoría de la carga eran los bultos".

El fiscal Schaefer concluyó que durante la etapa oral se logró acreditar que Maximiliano Esteban Gómez es responsable de las conductas previstas en el inciso C del artículo 5 de la ley 2373 [de estupefacientes], que prevé penas de cuatro a quince años de prisión para quien "comercie con estupefacientes o materias primas para su producción o fabricación o los tenga con fines de comercialización, o los distribuya, o dé en pago, o almacene o transporte". En tanto, el representante del Ministerio Público destacó que "no existe elemento probatorio" para inferir que Josué Maximiliano Gómez Ortiz "conocía que se llevaba la carga".

Por su parte, los jueces del Tribunal Oral de Corrientes acordaron en la sentencia que "hay una ligazón objetiva entre el imputado y el camión en el que se hallaron los bultos con marihuana, toda vez que Maximiliano Gómez fue aprehendido en condiciones de flagrancia, es decir, fue sorprendido por personal de Gendarmería Nacional en el momento en que, como chofer del camión demorado, trasladaba la droga". Por último, rechazaron los planteos de nulidad que habían presentado la defensa del hombre condenado.