Hoy, comienza el juicio oral contra Nelson Rubén Bravo, acusado de cometer el delito de amenazas coactivas y lesiones leves en tres oportunidades diferentes contra quien entonces era su pareja.
Durante la primera agresión, el acusado le dijo a su víctima mientras la tomaba del cuello con ambas manos: “No te voy a dejar hacer tu vida con nadie y te voy a pegar todas las veces que me dé la gana”. Según la acusación, el hombre le pegó una tropamada en la nariz a la mujer.
El segundo hecho de violencia ocurrió el 9 de noviembre de 2012, cuando la víctima salía de su trabajo. En esa oportunidad, el acusado se le acercó y le dijo: “Vos andas con otro, te voy a hacer la vida imposible”, y le dio otra trompada en la boca, lo que le provocó hematomas en el rostro.
Finalmente, a Bravo se le imputa haber amenazado a la víctima también en la puerta de su lugar de trabajo el 12 de noviembre de 2012. “Qué te haces ahora, para qué vas al gimnasio, te voy a pelar, no te voy a dejar tranquila”, le gritó. Y nuevamente la golpeó con el puño cerrado en el pómulo izquierdo que le produjo un hematoma retroauricular derecho y un hematoma en región malar izquierdo.
La mujer afirmó que las amenazas de parte de Bravo se repitieron en varias oportunidades con anterioridad a realizar la denuncia.
Por otra parte, fueron recolectados los elementos de prueba durante la etapa de instrucción que permiten tener por acreditados los hechos. Entre las pruebas, se encuentran las declaraciones de la víctima ante personal de la Oficina de Violencia Doméstica (OVD) donde relató las agresiones recibidas por Bravo en el interior de su vivienda y a la salida de su trabajo. En una oportunidad, manifestó que el acusado la obligó a mantener relaciones sexuales y que ella se veía obligada a acceder porque, de otro modo, él le decía que lo engañaba con otra persona.
Además, en el expediente fue incluido el informe psicosocial de riesgo elaborado por el OVD que indica que la mujer un perfil compatible con el de las víctimas de violencia conyugal y que la situación que padeció fue de alto riesgo.
Asimismo, se encuentra acreditado en el informe médico que la víctima presentaba al momento del exámen dos hematomas en diferentes partes de su cara.
Por todas estas pruebas, la Fiscalía de Instrucción N°10 formuló el requerimiento de elevación a juicio oral. La jueza María Gabriela Lanz aceptó el pedido el pasado 15 de julio de 2012.
Durante las audiencias, intervendrá la Fiscalía General N°6 ante los Tribunales Orales en lo Criminal, a cargo de Diana Goral.