Un hombre fue procesado por segunda vez, al ser identificado como la persona que pidió los rescates a cambio de la liberación de las víctimas durante dos secuestros extorsivos cometidos el año pasado en la provincia de Buenos Aires, en Villa Luzuriaga y Tres de Febrero. La resolución más reciente fue adoptada por el Juzgado Federal N°2 de Morón, en el marco de una causa por el primer hecho, instruida por el fiscal federal de esa jurisdicción, Carlos Hernán García, quien se encuentra a cargo de la investigación y solicitara dicho procesamiento.
El acusado Marcos Eduardo Pomponio ya había sido procesado con prisión preventiva en una causa en trámite la justicia de San Martín, con participación de la Fiscalía Federal con asiento en Tres de Febrero. En ese expediente se investiga el secuestro extorsivo del empresario Daniel Rebagliati, cometido el 25 de abril de 2015, que culminó con el pago de un millón 300 mil pesos y casi diez mil dólares, tras estar secuestrado por casi ocho días, circunstancia que tomara estado público en los medios de comunicación masiva.
Al tomar conocimiento de esa pesquisa, la Fiscalía Federal N° 2 de Morón compulsó lo allí actuado e impulsó una serie de medidas de prueba por el hecho cometido en Villa Luzuriaga: un agente policial de la DDI La Matanza de la policía de la provincia de Buenos Aires, que participó de ambas investigaciones, declaró que “la voz del interlocutor secuestrador” tenía similitud en cuanto al timbre y tono de la voz y la forma de expresarse. Eso fue corroborado a través de un peritaje realizado por una fonoaudióloga y una licenciada en física, ambas de la Sección Acústica Forense de la Policía Federal Argentina. Además, se determinó “no sólo la participación de una persona en común, sino que de acuerdo al ‘modus operandi’” se trataba de “la misma banda que intervino en ambos hechos”: actuaron “no menos de siete personas”; los llamados se hicieron desde los celulares propios de los captores; los cautiverios duraron lapsos prolongados; los montos de los rescates oscilaron en cifras similares, y la liberación de las víctimas se produjo en el partido de Lomas de Zamora, entre otras coincidencias.
El secuestro investigado por el fiscal García fue realizado el día 14 de abril de 2015 en Villa Luzuriaga, partido de La Matanza, y tuvo por víctima al dueño de una distribuidora y de una empresa de transportes, que otrora fuera miembro de la Cámara de Comercio de La Matanza. Los secuestradores exigían 500 mil dólares para liberar al empresario. Entretanto, en dos comunicaciones telefónicas dejaron hablar a la víctima con uno de sus hijos como “prueba de vida”. Cuando se estaba a punto de efectuar el pago, la víctima se comunicó desde una remisería e informó que ya se encontraba en libertad, de modo que la operación del pago no llegó a concretarse por circunstancias desconocidas, pero presuntamente por razones de desinteligencia entre los captores. El hombre estuvo en cautiverio durante 14 horas, lapso en el que denunció haber sido “picaneado” apenas fue interceptado mientras circulaba en su auto.
El acusado Pomponio, según sus propios dichos en la causa, ya había sido condenado por un “robo calificado” en Paraná, procesado por un homicidio en Lomas de Zamora, y procesado también por el secuestro en Tres de Febrero. Actualmente se encuentra detenido en el Complejo Penitenciario Federal de Marcos Paz, y el juez federal Jorge Ernesto Rodríguez le impuso también un embargo de 300 mil pesos.