El Tribunal Oral Federal Nº 5 de San Martín condenó al ex jefe de la Zona 4, Santiago Omar Riveros, a 25 años de prisión, al ex jefe de la Prefectura Naval de Zárate, Servando Ortega, a 9 años y al ex comisario de Escobar, Fernando Meneghini, a 6 años, en el marco del juicio por los crímenes que tuvieron como víctimas a 29 militantes políticos y referentes de base de Zárate y Campana.

Los jueces Alfredo Ruiz Paz, María Claudia Morgese Martín y Marcelo Díaz Cabral también revocaron la prisión domiciliaria de Riveros y dispusieron su alojamiento en el penal de Ezeiza.

Riveros fue encontrado responsable de allanamientos ilegales, robo, privación de la libertad de 28 personas y tormentos de 27.

Ortega es el único de los tres imputados que era juzgado por primera vez. De tal forma, con la sentencia de ayer suman 441 los condenados por crímenes de lesa humanidad desde el retorno del Estado de derecho, según informó la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad.

La fiscalía a cargo de Marcelo García Berro había pedido 14 años para Ortega por dos privaciones ilegales de la libertad. El tribunal dio por acreditado su participación en los hechos, pero por razones que no se conocerán hasta que se hagan públicos los fundamentos de la sentencia, le adjudicaron una pena menor. Sin embargo, Ortega, que estaba excarcelado, ahora deberá cumplir prisión domiciliaria.

Por su parte, el ex comisario Meneghini, que ya había contaba con otra condena a seis años de prisión, también tuvo la misma pena en esta causa. La fiscalía había pedido para él 14 años. Estaba acusado por privaciones ilegales de la libertad y tormentos de un grupo de personas que habían sido alojadas en condiciones inhumanas en las celdas de un camión celular estacionado en el predio de la comisaría. El tribunal mantuvo los cargos de privación ilegal de la libertad, pero lo absolvió de los tormentos.

Uno de los puntos destacados de la sentencia es que ordena la remisión al juez de instrucción de parte de las pruebas para que sean investigadas como delitos de índole sexual. El veredicto determinó que se cometieron delitos contra niños, muchos de ellos dejados en sus casas atados cuando se llevaban a los padres.

Pese a que dos de los tres imputados recibieron condenas menores a las solicitadas por la fiscalía, Marcelo García Berro y su par Guillermo Silva expresaron su conformidad con la sentencia y señalaron que esperarán la lectura de los fundamentos, que se llevará a cabo el 25 de septiembre, para resolver si recurrirán en Casación algún aspecto del fallo.