El Tribunal Oral Federal N°1 de Salta condenó en un fallo unánime a Jonatan Walter Soria, Yani Soria y Fabio Abimael Ruiz a la pena de 7 años y 6 meses de prisión por el delito de transporte de estupefacientes agravado por el número de personas intervinientes.
La sentencia fue dictada el 5 de agosto pasado por los jueces Marcelo Juárez Almaraz (presidente) y Federico Díaz y la jueza Marta Liliana Snopek. El debate, que se desarrolló por medios virtuales, había iniciado en julio pasado.
El fiscal José Luis Bruno, de la Sede Fiscal Descentralizada de Orán, llevó adelante la acusación penal. Sus planteos, tanto en materia de responsabilidad como al momento de determinar la pena, fueron destacados por el tribunal al momento del fallo.
En su alegato de apertura, el fiscal había adelantado la culpabilidad de los tres acusados en el transporte de la droga, descubierto el 19 de enero pasado en la ruta 50, a la altura del Río Colorado, cuando dos camionetas circulaban de Orán a Pichanal.
Bruno sostuvo que ambos rodados, marca VW Amarok y Ford F100, habían salido de una vivienda ubicada en el pasaje Los Nogales, en el barrio 9 de Julio de Orán, donde los acusados fueron vistos por un grupo de policías que tenían bajo vigilancia el inmueble.
Ese mismo día un vecino se presentó en la Dirección de Investigaciones Complejas contra la Narcocriminalidad de Orán, dependiente de la Policía de Salta, y reveló que en esa vivienda se preparaba una carga de drogas que iba a salir hacia el sur.
El denunciante dio detalles de los rodados que se iban a utilizar, que resultaron las dos camionetas luego interceptadas. Con estos datos, se llevó adelante una pesquisa que duró pocas horas, pues los policías vieron a los imputados entrar y salir de la casa hasta cerca de las 21, cuando ambos rodados abandonaron el inmueble.
“No podemos determinar si la droga se cargó en ese lugar, pero sí se puede sostener que allí estaba la camioneta y que, en su interior, se hallaba la droga, la cual no era desconocida para los acusados”, sostuvo el tribunal.
Interceptados
El fiscal recordó que, con un seguimiento discreto, se pudo establecer que la ruta elegida para el tráfico de la droga era la 50 en dirección a Pichanal y se dispuso su interceptación en un control que fue preparado antes de llegar a esa localidad.
Repasó que la camioneta Amarok, conducida por Ruiz, llevaba como acompañante a Yani Soria y hacía de coche “puntero”. Por detrás lo hacía la Ford F100, guiada por Jonatan Soria, quien en un doble fondo de la caja llevaba poco más de 143 kilos de cocaína.
Ante las preguntas de los policías respecto al destino, de dónde provenían y el motivo del viaje, los conductores mostraron evidencias de nerviosismo y ello aumentó la sospecha, que se confirmó cuando el can antinarcótico “Gringa” marcó la caja de la Ford F100 como el lugar donde había droga, recordó Bruno.
En el juicio, la fiscalía presentó varios testigos que confirmaron lo sucedido, a la vez que se produjeron otras pruebas sobre la participación de los Soria y Ruiz, quienes declararon y en todo momento trataron de deslindar responsabilidad por la carga. Adujeron, cada uno, que no sabían que el rodado llevaba esa cantidad de cocaína.
Ya en los alegatos de responsabilidad, el fiscal Bruno, asistido por la auxiliar fiscal María del Carmen Núñez, ratificó la acusación penal, resaltó las pruebas documentales, los peritajes y los testimonios que confirmaron la autoría de los tres acusados en el transporte de la droga.
“Quedó perfectamente determinado el hecho que fue traído a debate, como así también la responsabilidad de los acusados en el delito de transporte”, dijo el fiscal y desechó las versiones dadas por los imputados, quienes antes de la deliberación insistieron en que no sabían nada de la droga.
Sus defensores, en tanto, argumentaron sobre esa versión y explicaron, en el caso de los Soria, que ambos son mecánicos y que solamente fueron a arreglar el motor de la camioneta Ford F100, mientras la defensa de Ruiz sostuvo que fue un “convidado de piedra en todo el hecho”. En base a ello, pidieron la absolución.
Veredicto
Al momento de resolver la situación de los acusados, el juez Juárez Almaraz informó que se dictó la responsabilidad penal de los tres acusados, decisión que fue adoptada en base a los argumentos esgrimidos por la fiscalía.
Indicó que el hecho, que no fue controvertido por las defensas, sucedió tal como lo expuso la fiscalía. Resaltó el alegato de la fiscalía e hizo referencia a las pruebas señaladas, entre ellas los peritajes y las declaraciones testimoniales, las cuales no evidenciaron fisura alguna.
“No podemos determinar si la droga se cargó en ese lugar, pero sí se puede sostener que allí estaba la camioneta y que, en su interior, se hallaba la droga, la cual no era desconocida para los acusados”, sostuvo el magistrado, quien rechazó los argumentos defensivos respecto al desconocimiento aludido por los acusados.
La jueza Snopek y el juez Díaz, en tanto, adhirieron a los fundamentos, tras lo cual se dio paso al juicio de determinación de pena, oportunidad en que la fiscalía solicitó una pena de 7 años y 6 meses de prisión, mientras que las defensas apelaron al mínimo del delito de transporte de estupefacientes agravado. Respecto a estos planteos, el tribunal se inclinó por la pena requerida por la fiscalía, que finalmente se impuso a los tres acusados.