La Procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, transformó de manera definitiva el cargo de “Escribiente Auxiliar” en otro de “Escribiente” de 19 empleados y empleadas que se desempeñan en distintas fiscalías generales ante los tribunales orales en lo criminal de la Ciudad de Buenos Aires.
Gils Carbó tomó esta medida extraordinaria a partir de los “reiterados pedidos” formulados por los fiscales titulares de esas dependencias, en las que no existían cargos administrativos intermedios entre el de “Escribiente Auxiliar” y el de “Jefe de Despacho”, el escalafón más bajo y el más alto, respectivamente.
La medida también se enmarca en una primera etapa de un proceso gradual de adecuación de cargos de empleados y empleadas del Ministerio Público Fiscal, para continuar con el objetivo de “asegurar un eficiente y adecuado desempeño de las funciones encomendadas” al organismo, posibilitando “un mejor aprovechamiento de los recursos humanos disponibles” y, de esta manera, favorecer “la defensa de los intereses por los que este [Ministerio] debe velar”.