El domingo, el suplemento “Acceso a la Justicia” realizado por la Procuración General de la Nación acompañó a la edición del diario Crónica. En esta oportunidad, estuvo dedicado al deber de la justicia de llegar a los sectores más vulnerables de la sociedad.
Esta séptima edición incluyó una entrevista con el coordinador de las Agencias Territoriales de Acceso a la Justicia, Julián Axat, quien subrayó que los ATAJOs representan "un antes y un después" en el acceso al servicio de justicia. "La justicia tiene las características que siempre se marcan: burocrática y lenta. Suele ser un elefante en un bazar. Los jueces, fiscales, defensores atienden en edificios céntricos, y encima cuando uno llega se trata de laberintos de pasillos, despachos, mostradores, expedientes muchos expedientes) y la mayoría de las veces, la realidad de los barrios pobres llega a esos lugares con sesgos negativos y discriminatorios. El concepto de ATAJO, en cambio, busca la inclusión", explicó.
Además, "Acceso a la Justicia" presentó la historia de Romelia, quien vive hace cinco años en la villa de Barracas. En agosto, se acercó a uno de los ATAJOS a denunciar que la Gendarmería había detenido a su madre en La Quiaca, quien llevaba dinero que había conseguido a través de un crédito otorgado por el Banco de Jujuy para hacer compras del lado boliviano de la frontera. El juez la imputó por lavado de dinero y contrabando y le incautó los fondos.