Luego del receso de la feria judicial de invierno, se reanudó el debate en la causa por el encubrimiento y desviación de la investigación del atentado a la AMIA. Por sexta jornada, expuso su descargo ante el Tribunal Oral Federal Nº2, presidido por el juez Jorge Gorini, el ex magistrado Juan José Galeano. En la audiencia que comenzó a media mañana y finalizó a las 16:00, intervinieron en representación del Ministerio Público Fiscal el cotitular de la UFI AMIA, Roberto Salum, y el fiscal ad-hoc Miguel Yivoff.
El ex juez federal se detuvo durante la audiencia realizando su descargo, entre otros temas, respecto a la imputación que tiene por privación ilegal de la libertad y prevaricato en relación al procesamiento dictado, oportunamente, contra los policías bonaerenses - Juan Jose Ribelli, Anastasio Leal, Raul Ibarra, Mario Bareiro-. Además, negó “enfáticamente” haber conocido la falsedad de los hechos.
Galeano apuntó nuevamente contra los jueces del Tribunal Oral Federal Nº3, y refirió que “descalificaron" su trabajo y que hoy está sentado como imputado en este debate por “trabajar y trabajar mucho”. El ex magistrado se defendió sosteniendo que, para realizar tanto las detenciones, indagatorias y procesamientos contra los policías bonaerense, contó con elementos suficientes para hacerlo. En este sentido sostuvo: “Yo no tenía certeza negativa (…) ¿ustedes habría sobreseído?, yo creo que no?, manifestó ante los jueces.
“Tenía pruebas para procesar no para sobreseer (…) traté de hacer una instrucción rápida para que vaya a juicio pero faltaron recursos”, afirmó y acusó la presencia de maniobras ilícitas para entorpecer la investigación. En esta misma línea realizó su descargo sobre la acusación por privación ilegal de la libertad, nuevamente explicó que había pruebas que le impedían dar la libertad, y agregó que las detenciones estaban fundadas. Luego recordó que fueron revisadas por sus superiores, y remarcó: “No veo a ningún camarista sentado acá”.
El ex magistrado apoyó su descargo, entre otros elementos, en transcripciones de escuchas telefónicas, y destacó una conversación entre Juan Carlos Nicolau –“chofer y mano derecha de Ribelli”- y Carmelo Ionno –“socio” de Ribelli- . Allí, según los dichos de Galeano, habrían conversado respecto a que la camioneta Traffic habría pasado a Tigre. Frente a ello, contó el imputado, llamó a Nicolau y a Ionno a declarar, y fue en esa oportunidad que el chofer de Ribelli le habría dicho que se trataba de la camioneta “que voló la AMIA y que era de Telleldín”.
Ese era “el paso que se frustró investigar por errores del personal policial. No era un cassette, era una clave, un camino (…) por la corrupción en la Argentina, la camioneta tuvo un pase de manos”. “Esto está en la causa, estas no son falsedades”, esgrimió el imputado.
El Tribunal dispuso un cuarto intermedio hasta el próximo lunes a las 10:30.