“Pedir un préstamo o comprar con tarjeta de crédito puede ser de gran ayuda, pero es importante estar alerta ante posibles situaciones de abuso económico y legal”. Así comienza uno de los nuevos materiales de comunicación y formación para consumidoras y consumidores de servicios financieros elaborados por el Área de Fraudes Económicos y Bancarios de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac). La cartilla para talleres de trabajo en barrios y la guía de formación para promotores de derechos, comunicadores, docentes y formadores de organizaciones sociales tiene la intencionalidad de facilitar el acceso a la información y la comunicación de derechos. Además, buscan alertar sobre los abusos económicos y legales que caracterizan el mercado de los créditos.
Según la publicación “Créditos para el consumo. Análisis del fenómeno socioeconómico y su impacto en los sectores populares”, también elaborado por la Procelac, “la usura se configura cuando se produce un aprovechamiento de las necesidades o de la inexperiencia de las personas al cobrarles desproporcionadas tasas de interés u obtener garantías extorsivas en el marco de un préstamo, lo cual está penado por la ley”. De acuerdo a los hallazgos de la investigación, las entidades financieras concentradas en los barrios de la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires, lejos de propiciar vínculos de integración social y de democratización en términos económicos, contribuyen a reproducir las desigualdades sociales dado que cobran tasas de interés más elevadas que las que ofrece el mercado formal, imponen condiciones abusivas y llegan a otorgar un trato indigno para las y los consumidores.
Luego del debate público en torno a los altos costos cobrados a las consumidoras y consumidores, el Banco Central estableció topes máximos para las tasas tanto de créditos, como de tarjetas de crédito y otras entidades inscriptas en el registro elaborado por la autoridad monetaria.
La relación desigual, en términos económicos y técnicos, así como la modalidad del contrato de adhesión, pueden dar lugar a situaciones arbitrarias entre las que se encuentran: la provisión de información engañosa, las cláusulas abusivas de contratación y situaciones de trato indigno personal o telefónico.
¿A qué se le debe prestar atención a la hora de gestionar un préstamo o consumir con una tarjeta de crédito?
No solamente hay que mirar la tasa de interés, también se debe prestar atención a los otros gastos como el seguro de vida, las comisiones y los gastos administrativos entre otros. La suma de la tasa de interés y todos los otros gastos, va a dar como resultado el Costo Financiero Total (CFT).
En muchas ocasiones, se exige la firma de uno o varios pagaré en blanco. No es recomendable firmar documentos que no tengan todos los campos y detalles especificados porque pueden ser completados posteriormente en perjuicio del consumidor.