El Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional Nº25 continuó ayer con el juicio contra un hombre acusado de atropellar y matar a una ciclista en Palermo en enero de 2022 y contra otros tres hombres imputados por haber facilitado el encubrimiento. Durante la audiencia, declararon como testigos varias personas que estuvieron presentes al momento en que ocurrió el incidente. En el debate interviene la Fiscalía General Nº18 ante los Tribunales Orales Criminales y Correccionales, representada por el fiscal Guillermo Pérez de la Fuente.

La mañana del 2 de enero de 2022 José Carlos Olaya González manejaba su vehículo Ford Focus desde Avellaneda hasta Palermo en compañía de dos mujeres a las que estaba trasladando. Ambas habían formado parte de una salida nocturna que el joven y otros tres amigos habían llevado adelante. De acuerdo al requerimiento de elevación a juicio realizado por la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Nº50, durante la noche el joven había consumido sustancias estupefacientes y bebidas alcohólicas.

Cerca de las 8.30, Olaya González manejaba a 70 kilómetros por hora por la avenida Figueroa Alcorta al 5300 cuando perdió el dominio del automóvil: en lugar de tomar una leve curva hacia la derecha, continuó en trayectoria recta, traspasó a la mano contraria, se subió a la acera y embistió a los ciclistas que estaban allí. Como consecuencia de ello, provocó la muerte de Marcela Claudia Bimonte -que falleció en el Hospital Fernández- y le causó lesiones a cuatro personas; en tres de esos casos las heridas fueron graves.

Según la acusación, a pesar de lo que le dijeron sus acompañantes, Olaya González tomó distintos elementos que había en el auto -para la fiscalía, lo hizo para "para alterar la escena del hecho y procurar su impunidad"-  y se subió a una camioneta que era conducida por su amigo Fernando Ezequiel Escobar y huyó del lugar junto con Lucio Exequiel Valiente y Patricio Daniel Valiente, quienes viajaban en el vehículo como acompañantes. Los cuatro fueron detenidos a las 9.30 tras el alerta que se irradió sobre el rodado.

El juicio

Durante la primera audiencia -realizada la semana pasada-, los cuatro imputados se negaron a declarar, en tanto que ayer el tribunal escuchó los testimonios de las personas que presenciaron el momento en que la mujer fue atropellada. La próxima audiencia está prevista para el 27 de febrero y se prevé la declaración de otros testigos. Luego se llevarán a cabo los alegatos de las partes.

Ante el tribunal, la pareja de Bimonte declaró que había entre 30 y 40 personas con sus bicicletas aquella mañana y que de repente apareció un auto “a toda velocidad” que derrumbó un cartel de cemento y luego atropelló a la mujer.

Además, declararon las dos jóvenes que estaban en el vehículo con el acusado. Una de ellas aseguró que se dispuso a dormir en la parte de atrás del vehículo y que no observó lo sucedido pero que lo primero que recuerda tras el choque fue haberle preguntado al conductor qué había pasado. Contó que el imputado le habría respondido que se quedó dormido. Además, dio detalles de cómo había sido la noche y de lo que habían consumido todos. A su turno, la otra acompañante marcó que el joven se fue de la escena pocos minutos después de haber atropellado a Bimonte y a los otros ciclistas.

La calificación

De acuerdo al requerimiento de elevación a juicio, Olaya González llegó acusado por los delitos de “homicidio simple, lesiones graves reiteradas en tres ocasiones y lesiones leves, todos los cuales concurren idealmente entre sí, a título de dolo eventual”.

Subsidiariamente, el MPF acusó al conductor por los delitos de “homicidio culposo agravado por la conducción vehicular imprudente y antirreglamentaria de un vehículo con motor; por la ingesta previa de alcohol y sustancias estupefacientes; por haber el autor fugado del lugar del hecho; y por haber actuado con culpa temeraria; junto con los delitos de lesiones culposas graves reiteradas en tres ocasiones y lesiones culposas leves, todas ellas agravadas por haberse el conductor dado a la fuga, como así también por haber estado bajo los efectos de estupefacientes, además de haber consumido bebidas alcohólicas en forma previa, agravadas además por la conducción temeraria y por haber resultado lesionadas más de tres personas; delitos que concurren todos idealmente entre sí”.

Con respecto a los otros tres hombres, la fiscalía consideró que debían ser juzgados bajo la figura de “encubrimiento agravado por tratarse el hecho precedente de un delito especialmente grave, en la modalidad de favorecimiento personal, por haber ayudado a su autor a eludir las investigaciones de la autoridad o a sustraerse de la acción de aquella; así como también favorecimiento real, al haber ayudado a ocultar o hacer desaparecer las pruebas del delito; todos los cuales concurren idealmente entre sí”.