El fiscal Jorge Di Lello, a cargo de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Federal 1, se excusó de intervenir en el expediente originado por una medida cautelar presentada por la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional para frenar la aplicación de la Ley 26.855, promulgada por el Poder Ejecutivo el pasado lunes. Di Lello fundamentó su propia exclusión sobre la figura de “motivos graves de decoro o delicadeza”, prevista en el artículo 30 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación. Según describió en el dictamen, ello surge del rol que cumplió en la Asociación que impulsó el amparo y de la amistad que lo une con uno de los firmantes, el abogado Gregorio Corach.
Para el fiscal, estos elementos podrían habilitar cuestionamientos acerca de su imparcialidad y tornarían “dudosa” su transparencia y desinterés personal en el resultado del litigio.
Por último, respecto de la inmediatez requerida por Servini de Cubría, a raíz de “la proximidad del vencimiento de los plazos del cronograma electoral en curso”, Di Lello estimó que “puede parecer incongruente que en este ámbito judicial se establezcan plazos procesales distintos a los establecidos por el código de forma, más aún cuando se resuelve sobre el propio interés de quien resuelve”.