Días atrás, el juez federal de General Roca Jorge García Davini, quien se encuentra a cargo de la investigación por los casi 300 kilos de cocaína escondida en cajones de manzanas, ordenó el procesamiento con prisión preventiva de tres hombres por considerarlos los presuntos autores de del delito de contrabando de estupefacientes con destino de comercialización, agravado por la intervención de tres o más personas, en grado de tentativa. Además, convirtió las detenciones que venían sufriendo en prisión preventiva y trabó embargos sobre los bienes por 99 millones de pesos.

Se trata de Gustavo Daniel Arnaldo, Omar Daniel Pancari, y Tany Cortéz Molina. A su vez, dictó la falta de mérito de otros tres imputados, “sin perjuicio de continuar con la investigación a su respecto”, entre quienes se encuentra la despachante de aduanas que intervino en los trámites administrativos y el conductor del camión. Como el chofer además se encontraba detenido, el juez ordenó la liberación, aunque con la prohibición de salir del país.

El destino de quienes resultaron procesados quedó marcado luego de que el pasado 4 de junio, en el control desarrollado en la Zona Primaria Aduanera ubicada en la Ruta Nacional 22, km 1127, de la localidad Villa Regina, Departamento General Roca, Provincia de Río Negro, dos agentes aduaneros que realizaban tareas propias de inspección física de la mercadería de un camión “detectaron una imagen que consideraron ‘dudosa/extraña’ en una de las cajas que se encontraban en el contenedor” del vehículo.

La mercadería llevaba impuesta la marca “Frutas Kis” y provenían del frigorífico “NEWEN SRL”. Esta firma sería propiedad del imputado Arnaldo junto a otra persona. A partir de la requisa que realizaron, se encontraron 287,375 kg. de clorhidrato de cocaína, que se hallaba oculta en el interior de los pallets que transportaban cajas de frutas de la empresa “Frutas Kis”. La sustancia estaba distribuida en 42 paquetes ubicados en el fondo de sendas cajas con manzanas en su interior.

El cargamento estaba destinado a ser exportado desde el frigorífico de Arnaldo hacia el Reino de España, con salida a través de la Aduana ubicada en Villa Regina y por intermedio del puerto de la Ciudad de Buenos Aires. De acuerdo a las distintas investigaciones realizadas por la justicia, la fiscalía federal -a cargo del fiscal federal Alejandro Moldes- y las fuerzas de seguridad, se pudo averiguar que en el hecho habrían intervenido más de tres personas.

En el caso de los procesados, su participación se habría dado de la siguiente manera: Arnaldo, como socio de la empresa NEWEN S.R.L, habría estado involucrado en el acomodado del estupefaciente dentro de las cajas, almacenado las mismas y, en su frigorífico, se habría procedido a la carga del camión. En el caso de Cortéz Molina, empleado de la empresa de Arnaldo, habría realizado las mismas actividades que su jefe. Finalmente, Omar Pancari uno de los titulares de la firma Industrias Cruxol Impex SLU -radicada en España-, habría involucrado a esta empresa como la importadora de la mercadería que contenía el estupefaciente.

A lo largo de estas semanas, se concretaron distintos allanamientos, en los cuales se secuestró documentación, distintos tipos de bienes y dinero. Toda esta información se encuentra incorporada al expediente y formó parte de las consideraciones que realizó el juez para dictar los procesamientos.

Actualmente, los tres imputados procesados han interpuesto recurso de apelación respecto a lo resuelto por el juez, así como también lo hizo el fiscal federal Moldes con relación a alguna de las cuestiones resueltas a fin de ampliar la calificación legal que ha sido atribuida a los imputados y evitar la devolución de efectos secuestrados que habrían sido utilizados para cometer el delito que se investiga.

La causa, próximamente, será elevada a la Cámara Federal de Apelaciones para el tratamiento de los recursos interpuestos, mientras se continúa con la investigación en el juzgado federal.