La fiscal federal a cargo de la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM), Mariela Labozzetta, llegó por segunda vez a Mar del Plata para abordar, en trabajo conjunto con los fiscales Laura Mazzaferri y Nicolás Czizik, y el titular de la Unidad Fiscal Especializada en Ciber-delincuencia (UFECI), Horacio Azzolin, la causa que investiga los ataques neonazis en la ciudad balnearia y que tiene seis personas detenidas hasta el momento. Al dar cuenta de la intervención que tendrá la dependencia del MPF a su cargo, explicó que en primer lugar se busca trabajar en la construcción de la información y en líneas de investigación no del todo exploradas hasta el momento.

Por otro lado, dijo que buscará “hacer emerger la cuestión de género en la causa” y en este sentido, planteó la posibilidad de “intervenir sobre los puntos técnicos más débiles de la ley antidiscriminatoria”, que no prevé en concreto como una de las causales de discriminación a la cuestión de género. Frente a ello, no descartó “hacer eventualmente algún planteo sobre las deficiencias legislativas, que no están pudiendo incorporar ni a las mujeres ni las personas por diversidad”.

Como tercer eje, sostuvo que se trabajará con la conflictividad social, a través de las organizaciones, para después ir viendo qué va apareciendo a partir de esos contactos. “Ver cuáles son los relatos, qué elementos aparecen, identificar a las víctimas. Hay muchas que ya nos empezaron a decir que no se animan a declarar. Ver cuál es la problemática central que involucra esta investigación, qué tan sistemáticos son los ataques, de qué calidad son, desde cuándo. La información del territorio”, sintetizó Labozzetta.

La procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, había dispuesto no sólo la creación de un equipo de trabajo integrado por los titulares de las fiscalías federales N°1 y N°2 en las causas vinculadas con actos de discriminación o con las conductas previstas en el artículo 213 bis del Código Penal, sino también la colaboración de las unidades fiscales especializadas en violencia de género y en ciber-delincuencia (UFECI).

Sus titulares estuvieron en Mar del Plata y, en primera término, mantuvieron una reunión de trabajo con los fiscales de instrucción y el fiscal de Distrito, Daniel Adler. Luego, Labozzetta recibió a representantes de AMADI, cuyos integrantes han sido víctimas de estos ataques, para luego reunirse en sede de la CTA local con representantes de organizaciones tales como Asociación por un Mundo Igualitario (AMI); el Grupo Transparencia Marplatense (GTM), que nuclea a mujeres trans en estado vulnerable, Alameda, la Asociación Civil Ateos Mar del Plata y la Asamblea por una Sociedad Sin Fascismo. También estuvo presente Daniela Castro, quien es secretaria de Género de CTA, junto a otras dirigentes de la central.

“La intervención de la UFEM tiene que ver con la necesidad de visibilizar la cuestión de género acá, que es una problemática particular. Desde el punto de vista de la agresión, los ataques neonazis tienen una complejidad que necesita de un trabajo en equipo porque se pueden juntar las causas, y eso no permite solo identificar los mismos imputados en distintos ataques, sino que además se puede imputar a la organización. El hecho de nuclear las causas, hace que se pueda imputar la organización de la que habla el artículo 213 bis”, explicó la fiscal.

En este sentido, señaló que “desde el punto de vista de los colectivos afectados, el colectivo diversidad es uno de los objetos de ataque y esto forma parte del universo de vulnerabilidad al que usualmente están expuestos”.

Labozzetta habló de ataques “muy violentos” y planteó que “el sentido del trabajo de la UFEM es hacer emerger la cuestión de género en la causa”.  Al respecto, sostuvo: “Hay líneas de investigación que queremos ampliar, juntar toda la información sobre otros ataques a personas trans que no están declaradas en la causa”.

Frente a ello, la fiscal mencionó que una de las líneas de trabajo de la UFEM es “abrir la investigación por afuera del expediente judicial y poder responder también a la problemática que está detrás, porque el riesgo y la conflictividad social están vigentes”.

Ante esta realidad, destacó el rol de los integrantes de ATAJO de Mar del Plata y valoró su intervención para “lograr romper resistencias que son legítimas porque (las mujeres trans) están expuestas a situaciones constantes de violencia”.