En línea con lo requerido por la Fiscalía de Instrucción del Distrito de los barrios de Saavedra y Núñez, a cargo del fiscal José María Campagnoli, la sala 4 de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional ordenó la prisión preventiva de un hombre acusado de cometer doce robos a bordo de una motocicleta. En el fallo, los jueces Carlos Alberto González e Ignacio Rodríguez Varela le enviaron el expediente al juez de instrucción para que libre la orden de detención.

Leandro Bazán está procesado por el delito de “robo simple reiterado en doce oportunidades”. Nueve de esos hechos ocurrieron en el transcurso de un solo día, en septiembre de 2018. En aquél momento, fue detenido y tenía en su poder diez celulares, aunque luego fue liberado. Cabe destacar que, en marzo de este año, Bazán fue condenado a tres años de prisión en suspenso por dos hechos similares ocurridos también en 2018, como puntualizó la Cámara en su fallo y como lo había hecho el fiscal Campagnoli en su recurso.

En la resolución, los magistrados consideraron que correspondía fijar la detención y prisión preventiva de Bazán ya que no era posible disipar los riesgos procesales con medidas de menos intensidad. Marcaron que, de dictarse una nueva sentencia, no podrá ser ya de cumplimiento condicional. Tuvieron en cuenta, además, “el significativo número de delitos contra la propiedad perpetrados en escaso tiempo”. “Se adunan las particularidades de su comisión pues arremetía contra sus víctimas arrebatándoles sus pertenencias, siendo que tal violencia se ha visto incrementada en todos los casos por el uso de una motocicleta de gran cilindrada, a bordo de la cual se acercaba por detrás tomándolas por sorpresa mientras ellas caminaban por la vereda”, consignaron.

En el análisis, destacaron que en uno de los casos abordó a un menor y que todos los episodios fueron en horario nocturno. Recalcaron también “la grave y reiterada infracción que implica el mero hecho de circular por el lugar mencionado, en más de una ocasión la fuga fue realizada en contra mano, refleja conducta desaprensiva no sólo en perjuicio de sus ocasionales damnificados sino de otros transeúntes”.