La titular de la Fiscalía de Instrucción N° 41, Silvana Russi, elevó a juicio la investigación que se sigue contra Lucas “Lukita” Silvero y Luis Alberto “Guasón” Chávez por el homicidio del oficial de la Policía Metropolitana Carlos Alfredo Escobar y por el robo de un vehículo utilizado para interceptar a la víctima.

En su pedido, la fiscal distingue dos hechos ocurridos en la madrugada del 14 de abril de 2012: un robo agravado por el uso de arma de fuego, en el que resultaron perjudicados Daniel Straga, Marcio Cornú y Liliana Reichenbaum; y el homicidio de Escobar, en concurso real con robo agravado por el uso de arma de fuego en perjuicio de María Laura Silva. En ambos casos, estaría acreditada la participación de, al menos, cinco personas que se desplazaban en vehículos de alta gama, pero sólo se pudo identificar a Silvero y a Chávez.

En el primer hecho, ocurrido en el cruce de las calles Belaustegui y San Martín, los imputados -junto a tres cómplices- le habrían robado a Straga su auto Audi A4, mientras que a sus acompañantes les robaron efectos personales, incluido el celular de Cornú.

Aproximadamente media hora después, los acusados interceptaron el Volkswagen Vento en el que transitaban Escobar y Silva por la calle Rojas al 600 y los hicieron bajar. Mientras la mujer entregaba un anillo, los imputados habrían disparado contra Escobar al identificarlo como policía. Los balazos le produjeron tres heridas graves, que culminaron con su muerte en el Hospital Durand.

La participación de Silvero y Chávez -en ambos hechos- quedó emparentada por el celular de Cornú. El hombre reconoció su equipo cuando Silva advirtió en la Comisaría que dentro de su cartera había un teléfono móvil que no era suyo.

En diligencias efectuadas por la policía en Villa Zabaleta, distintas personas confirmaron que algunos integrantes de la banda conocida como “Los Pibes de la Zabaleta” o “Los Pibes de los Monoblocks”, se jactaban de robar autos y haber asesinado a un policía metropolitano. Gracias al cotejo de los identikits de los imputados con las imágenes obtenidas a través de la red social Facebook, y a que los damnificados identificaron a los imputados en rueda de reconocimiento, Russi pudo determinar que los líderes de la banda delictiva serían los responsables del crimen de Escobar.

Ahora, la representante del Ministerio Público dispuso la clausura de las actuaciones y solicitó al juzgado la elevación a juicio de la investigación.