El fiscal federal Franco Picardi solicitó la elevación a juicio de cinco acusados de cometer un secuestro extorsivo durante la madrugada del 14 de abril de este año, cuando un hombre fue abordado en las inmediaciones de la calle Doblas y la avenida Directorio por varios sujetos armados que se desplazaban en un Audi A3. La víctima fue liberada cerca de las 5.30 en la localidad bonaerense de Luis Guillón, tras el pago de un rescate.
A poco de iniciada la pesquisa se había logrado la detención de tres de los acusados. Con el avance de la investigación se logró la identificación de otros dos imputados, de manera que el titular de la Fiscalía Federal N°5 le requirió hoy al juez Sebastián Casanello que todos sean enviados a juicio oral y público. Se trata de Juan Pablo Aguirre Reynoso, David Chávez, Martín Ramón Mena, Héctor Rodrigo Faría -a quienes se le endilga la coautoría del hecho- y Gastón Andrés Ceballos -imputado por su presunta participación como cómplice, al entregar las armas con las que se logró reducir y amedrentar al hombre secuestrado-. Faría, a su vez, se encuentra detenido y procesado por un homicidio simple en una causa que tramita en la justicia provincial de Lomas de Zamora.
La víctima sufrió lesiones en distintas partes de su cuerpo, producto de las agresiones sufridas durante el secuestro.
El hecho por el que serán juzgados
De acuerdo al requerimiento de elevación a juicio, la logística desplegada por los captores incluyó la utilización de dos inmuebles distintos, ubicados en la zona sur de la provincia de Buenos Aires, en los que se mantuvo cautivo al damnificado por varias horas, mientras se realizaban sucesivas llamadas telefónicas a los familiares y amigos de la víctima para exigir el pago de un rescate a cambio de su liberación, que se concretó en las cercanías del Puente de La Noria con la entrega de 50 mil pesos y diversos objetos de valor. El hombre fue liberado cerca de las 5.30 de la madrugada, a pocas cuadras de Camino de Cintura y Zuviría de la localidad de Luis Guillón. La víctima sufrió lesiones en distintas partes de su cuerpo, producto de las agresiones sufridas durante el secuestro.
La entrega del dinero se realizó de manera controlada: un dispositivo GPS oculto reveló el recorrido de los autores desde el lugar del pago hasta Plaul y Viamonte, en Lanús Oeste.
La primera detención fue la del imputado Aguirre Reynoso: la captura permitió el análisis de un celular -peritaje llevado adelante por las Divisiones Tecnología Aplicada y Operativa Central de la Policía Federal Argentina, y la Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal (DATIP) de la Procuración General de la Nación-, que contenía imágenes del Mercedes Benz sustraído al momento del secuestro de la víctima, en la zona de Parque Chacabuco, y del Audi en el que se desplazaban los captores, que habría sido utilizado luego para movilizarse hasta los lugares de cobro del rescate y liberación. Ese vehículo pertenece a una persona que fue secuestrada el 5 de abril, también durante la noche, suceso por el que se inició la investigación correspondiente ante el Juzgado Federal N°7 que encabeza Casanello. Por ese motivo, se estima que la banda se encuentra relacionada con al menos otros dos hechos muy parecidos, originados en la zona sur de la Capital Federal.
Tras analizar más de 40 elementos de prueba, Picardi solicitó la elevación a juicio de los acusados. Además, estimó que corresponde el sobreseimiento de un sexto imputado por no haber indicios que permitan “presumir que participó de algún modo en este hecho”.