25 de abril de 2024
25 de abril de 2024 | Las Noticias del Ministerio Público Fiscal
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Una medida solicitada por la Unidad Fiscal Federal
La Plata: inspeccionan la Comisaria Segunda en la investigación sobre su funcionamiento como centro clandestino de detención
Lo ordenó el Juzgado Federal N°1 de esa ciudad. Participaron funcionarios y funcionarias judiciales y tres testigos que fueron alojados allí de forma ilegal durante el terrorismo de Estado. En la causa se investiga la responsabilidad de siete funcionarios policiales por los delitos de lesa humanidad cometidos en perjuicio de ocho víctimas.

El titular del Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal N° 1 de La Plata, Alejo Ramos Padilla, encabezó ayer, junto al auxiliar fiscal Juan Martín Nogueira, integrante de la Unidad Fiscal Federal de esa jurisdicción, una inspección ocular en la Comisaría Segunda de la Policía de la provincia de Buenos Aires, ubicada en la avenida 38, entre 7 y 8, de esa capital. La medida fue llevada a cabo la causa que investiga la responsabilidad de siete funcionarios policiales por delitos de lesa humanidad cometidos en perjuicio de ocho víctimas que estuvieron detenidas de forma ilegal en la seccional, que funcionó como centro clandestino de detención (CCD) durante el terrorismo de Estado.

Además de las y los funcionarios judiciales, de la inspección participaron tres testigos que estuvieron secuestrados allí: uno, en 1976, durante dos meses aproximadamente; los otros dos estuvieron privados ilegalmente de su libertad en 1978 en la planta alta del edificio, donde fueron sometidos a interrogatorios y torturas.

La inspección desarrollada ayer había sido requerida por la Unidad Fiscal de La Plata -que está integrada por los fiscales generales Hernán Schapiro y Gonzalo Miranda, y Juan Martín Nogueira y Ana Oberlin, auxiliares fiscales-, que en su presentación señaló que está demostrado que durante el terrorismo de Estado las víctimas de la causa fueron privadas ilegalmente de la libertad en las instalaciones de la comisaria, donde padecieron distintos delitos vinculados a la lógica del sistema de desapariciones implementado en la época.

Según la hipótesis, allí fueron trasladadas víctimas de la represión ilegal, alojadas luego de estar en otros centros clandestinos o bien como primer punto de detención para su cautiverio en otro lugar. A su vez, la fiscalía destacó que desde 1977 la planta alta fue ocupada por la Delegación La Plata de la Dirección General de Informaciones de la Policía de la provincia de Buenos Aires (DIPPBA).

En ese sentido, la fiscalía sostuvo que resultarían responsables por las detenciones ilegales y los tormentos de las víctimas quienes desempeñaron los cargos de jefes y subjefes de la Dirección de Seguridad, de jefes y subjefes de la Dirección de Inteligencia, comisarios y subcomisarios de la Comisaria Segunda, y a los entonces jefes y subjefes de la Delegación La Plata de la DIPPBA.

Los hechos

En total son ocho las víctimas de las que se tiene conocimiento que habrían permanecido privadas ilegalmente de su libertad en aquella seccional.

El secuestro de cuatro de ellas se produjo el 16 de mayo de 1976, en momentos en que se encontraban por realizar, junto a otros compañeros de la Facultad de Ciencias Veterinarias, una actividad panfletaria durante un partido de fútbol que se disputaría en el estadio de Estudiantes de La Plata. Allí permanecieron detenidos de forma ilegal hasta fines de julio de 1976, cuando fueron trasladadas a la Comisaria Octava. A partir de ahí, tres fueron derivadas a otras dependencias policiales, hasta que finalmente obtuvieron su libertad, mientras que uno todavía permanece desaparecido.

Otra de las víctimas y también testigo de esta causa fue detenida el 2 de septiembre de 1977 en un operativo militar de tránsito, en el ingreso a la ciudad. En su testimonio, narró que fue llevada en su propio vehículo sin ser tabicada, por lo cual tenía plena certeza de su traslado a la Comisaría Segunda, donde quedó alojada por dos días en una celda común -sin haber sido tabicada ni torturada-, y en donde escuchó que torturaban a otras personas con picana eléctrica.

Otro de los hechos investigados en la causa ocurrió en la madrugada del 25 de julio del año 1978, cuando una pareja fue secuestrada en el domicilio en el cual residían con su pequeño hijo. Según la reconstrucción de lo ocurrido, siete u ocho hombres vestidos de civil –que se habían presentado como personal de seguridad de la Policía Federal- ingresaron violentamente por los techos y por un patio interno mientras las víctimas dormían. Los hombres revisaron toda la casa y luego las subieron a un Renault 12, haciendo un recorrido por el barrio de Tolosa, durante el cual los secuestradores decidieron dejar al niño de la joven pareja en el domicilio de otra pareja y trasladar a su padre y a su madre a la Comisaría Segunda.

De acuerdo con la investigación, ambos fueron alojados en la planta alta, donde fueron torturados e interrogados acerca de compañeros de la universidad. Permanecieron detenida y detenido ilegalmente por algunas horas hasta que fueron trasladados al CCD “La Cacha”, ubicado dentro del predio de la cárcel de Olmos. A los dos días, él fue liberado mientras que ella permaneció detenida hasta el 15 de agosto. Cuando él fue liberado, lo llevaron al domicilio donde se encontraba su hijo, para entregárselo con la condición de que se fuera de La Plata.

Ambas victimas brindaron testimonio, del cual se pudo reconstruir el caso de una tercera persona que estuvo detenida ilegalmente junto a ellos en aquella seccional desde el 24 de julio de 1978 y que aún se encuentra desaparecida. Esta víctima había sido secuestrada del domicilio que residía con su pareja y sus dos hijos. Los policías que realizaron el operativo, además de llevarse al hombre, mantuvieron a su pareja secuestrada en su propio domicilio junto a sus hijos, su cuñado, y la esposa de éste, junto a sus dos hijas, por el transcurso de varios días.