18 de abril de 2024
18 de abril de 2024 | Las Noticias del Ministerio Público Fiscal
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Interviene el fiscal Martín Suárez Faisal
Santa Fe: juzgan a una imputada por la apropiación de un niño y a la médica que falsificó los documentos
Los padres del niño sobrevivieron al terrorismo de Estado. La víctima nació en Reconquista en 1977 y fue sustraída en una clínica de esa ciudad y entregada a un matrimonio. El fallecido militar de la Fuerza Aérea Danilo Sambuelli tuvo un rol central.

La médica obstetra que certificó falsamente la identidad de un niño y la mujer que se valió de esa documentación para inscribirlo como propio comenzarán a ser juzgadas esta mañana en Santa Fe, en el singular caso de la apropiación del hijo de una pareja de Reconquista sobreviviente del terrorismo de Estado. Las acusadas que llegan a juicio oral en libertad bajo caución son Cecilia Ramona Góngora, imputada de apropiarse del niño de Luisa Beatriz Pratto y Rubén Maulin, y la médica Elsa Gladys Nsatsky.

A este debate, debieron llegar también el condenado oficial de la Fuerza Aérea y ex interventor de la municipalidad de Reconquista durante la última dictadura cívico-militar, Danilo Sambuelli, y la pareja de Góngora, Luis Ángel Segretín, pero ambos fallecieron.

El debate estará a cargo de los jueces José María Escobar Cello (presidente), Luciano Lauría y María Ivón Vella, integrantes del Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Santa Fe, ante quienes intervendrá el fiscal general Martín Suárez Faisal, asistido por el personal de la Unidad especializada en casos de violaciones a los derechos humanos de esa jurisdicción.

Góngora llega acusada por la Fiscalía por los delitos de sustracción, retención y ocultamiento de un menor de diez años, supresión de estado civil de un menor de diez años, falsedad ideológica de documento público en relación con el certificado de nacido vivo, falsedad ideológica de documento público respecto del acta de nacimiento, y falsedad ideológica de documento público destinado a acreditar la identidad.

Nasatsky está imputada por hacer incierto, alterar o suprimir la identidad de un menor de diez años, falsificación ideológica de documentos públicos destinados a acreditar la identidad de las personas respecto del certificado de nacimiento y de la partida de nacimiento y DNI, y de la sustracción, retención y ocultamiento de un menor de diez años.

Marzo de 1977

El hijo de Rubén Maulin y Luisa Beatriz Pratto nació el 26 de marzo de 1977 en el Sanatorio Reconquista e inmediatamente fue inscripto como hijo de Segretín -empleado de la terminal de ómnibus- y Góngora, y sustraído de la guarda de su madre.

Para esa fecha, Maulin se encontraba privado ilegalmente de la libertad. Había sido secuestrado el 19 de octubre de 1976 por la policía provincial y permanecía cautivo en el penal de Coronda. Su pareja, Luisa Pratto, estaba embarazada de tres meses.

Luisa, en tanto, no fue secuestrada, pero sí fue hostigada por miembros de la policía provincial, quienes irrumpían usualmente en su domicilio, incluso para someterla a abusos sexuales.

En ese contexto, en febrero de 1977, casi dos meses antes del parto, Griselda Pratto, hermana de Luisa, fue a visitarla para acompañarla antes y después de que diera a luz. El 5 de febrero, Griselda fue secuestrada y confinada en la Base Aérea Militar Reconquista, donde estuvo cautiva y fue sometida a torturas y abusos hasta el mismo día del nacimiento de su sobrino.

Aquella jornada fue liberada y, según declaró, el propio Sambuelli le dijo que fuera al sanatorio porque había nacido el hijo de su hermana. Allí, fue testigo de la sustracción del niño: oyó que a su hermana le decían que era "la señora de Segretín" y que, tras darle de mamar, fue obligada a entregar el bebé a una enfermera, tras lo cual no lo vieron más.

El fiscal federal de Reconquista, Roberto Salum, indicó en el requerimiento de elevación a juicio -que hoy será leído en la primera audiencia de debate- que "la sustracción del menor ocurrida el 26 de marzo de 1977 y perpetuada en el tiempo, también con las notas de desaparición forzada de personas, se produce en ese contexto de detenciones ilegales producido en el seno de ese grupo familiar y, más allá de que las mismas merezcan calificarse como delitos de lesa humanidad, imponen a su vez dicha calificación en orden al caso concreto del menor sustraído en esa situación particular de su propio grupo familiar".

Para que los hechos se dieran de la forma en que ocurrieron, hubo una actuación trascendente de una tía de Maulin, Margarita Shoesting, quien concurrió al domicilio de Luisa Pratto una semana antes del parto y le presentó a Cecilia Góngora. En el encuentro, Shoesting le dijo a Pratto que Góngora la ayudaría a pagar los gastos y a cuidar el bebé. "No me dijo que me iba a robar el bebé", declaró la Luisa años después.

Su hijo, que aún tiene el nombre que le dieron sus apropiadores, recuperó la identidad en 2009, cuando se hizo el análisis genético a través del cual se supo que es descendiente de Malin y Pratto.