En el marco de una pesquisa articulada mediante un Equipo Conjunto de Investigación (ECI) entre la Fiscalía Federal N°2 y la UFIEJ Estupefacientes del Departamento Judicial Mar del Plata, se realizaron el jueves pasado cuatro allanamientos en distintos puntos de la ciudad, que tuvieron como resultado el secuestro de marihuana y cocaína fraccionada para la venta, dinero en efectivo y distintos elementos de interés para la causa, como tarjetas de débito y de pago electrónico, celulares, computadoras, balanzas y una libreta con anotaciones.

Los operativos fueron dispuestos por el juez Santiago Martín, a cargo interinamente del Juzgado Federal N°1 de Mar del Plata, a partir del dictamen presentado por el fiscal a cargo de la Fiscalía Federal N°2, Santiago Eyherabide y el informe emitido por la División Antidrogas Mar del Plata de la Policía Federal Argentina.

La medida tuvo varios objetivos: por un lado, hacer cesar la comisión del delito, del que se obtuvo información a partir del uso de la figura del agente revelador, prevista en la ley 27.319. Por otro lado, también se buscó nutrir de más elementos de interés la investigación para avanzar en posible eslabones superiores de la cadena de tráfico, para lo que se analizará la información que arrojen agendas, celulares y dispositivos electrónicos. Al mismo tiempo, se hizo foco en “otorgarle un debido abordaje interdisciplinario a esta problemática”.

En su dictamen, el representante del Ministerio Público Fiscal había referido que “la dinámica de investigación bajo la intervención del agente revelador ha permitido en términos relativamente breves de investigación detectar reiteradas y constantes maniobras de comercialización de estupefacientes por parte de las personas individualizadas (…) en distintos barrios notoriamente poblados de esta ciudad y que son ofrecidas en un grupo público de comunicación on line de forma constante y sistemática”.

Cabe resaltar que tres de los cuatro domicilios allanados se ubican en inmediaciones del Casino Central y del shopping edificado en la vieja terminal de la ciudad. En este sentido, el fiscal federal entendió que “la operatoria de comercio bajo este mecanismo de concertación entre oferta y demanda se presenta con un dinamismo y fugacidad que exige realizar los procedimientos con premura, dada la mutación de líneas y cambios de domicilios que con regularidad se advierten entre los responsables”.