El Defensor del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires, Carlos Bonicatto, presentó un oficio en la Procuración General de la Nación en el que repudia “las intimidaciones de las que fuera víctima el fiscal General ante la Cámara Federal de Apelaciones de Mar del Plata, Daniel Adler", e hizo extensiva la solidaridad a la familia del representante del Ministerio Público.
En el escrito, Bonciatto destacó que Adler, su esposa e hijos "fueron víctimas de acoso, persecución y amenazas, a raíz de su participación en el jury de enjuiciamiento que enfrentó el Fiscal José María Campagnoli”.
Frente a eso, agregó que el fiscal General de Mar del Plata era un hombre de “reconocida trayectoria en la labor judicial, comprometido con la justicia, la verdad y la defensa de los derechos humanos” y que “ha sido objeto de un ataque ruin y antidemocrático”.
El funcionario puntualizó además que no era “sólo un deber, sino también una convicción, rechazar toda expresión de violencia que atente contra el normal desempeño de la justicia y las instituciones, ya que se tratan […] de actos antidemocráticos que dañan profundamente los valores que como representantes del Estado buscamos consolidar”.
Finalmente, remarcó: “no podemos permitir desde las distintas instituciones de derechos humanos en las cuales llevamos adelante nuestras tareas, que a más de treinta años de la recuperación democrática, personas comprometidas y en ejercicio de sus funciones institucionales, sufran intimidaciones cobardes que rememoran los tiempos más oscuros de nuestra historia”.
Otros respaldos
La resolución firmada por Bonicatto se suma a otros pronunciamientos en apoyo a Adler y su familia que han realizado funcionarios políticos de diversos partidos, organismos de derechos humanos y miembros de los sectores académicos, judiciales, barriales y culturales.
Asimismo, la Procuración General y los fiscales de distrito ya habían respaldado el trabajo del presidente del Tribunal de Enjuiciamiento y repudiado las agresiones sufridas.