El viernes pasado, la Procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, se reunió con  representantes de la Asociación para la Prevención de la Tortura (APT), quienes llegaron al país para participar de las primeras jornadas sobre la prevención de la tortura en el Cono Sur que tuvieron lugar el miércoles 14 y jueves 15 de agosto.

Del encuentro en la sede de la Procuración participaron también el titular de la Procuraduría contra la Violencia Institucional (Procuvin), Abel Córdoba y su coordinador, Roberto Cipriano García, quien destacó la importancia de promover mecanismos locales y nacionales de control de la tortura y la creación de grupos de trabajo especializados como la Procuvin.

“La Procuvin Ingresa un concepto novedoso de trabajo, de desarrollo institucional y de posicionamiento del Ministerio Público frente a la ejecución penal. Hay una concepción de que los fiscales estaban para meter a los presos en la cárcel y después se olvidaban de lo que pasaba con las personas. Pero nosotros pensamos que los fiscales son garantes del cumplimiento de todos los pactos internacionales de derechos humanos que Argentina ha suscrito y tienen que estar comprometidos en ese proceso de ejecución”, sostuvo Cipriano García.

Por su parte, la directora de la Oficina para América Latina de APT, Sylvia Diniz Dias, afirmó: “La creación de la Procuvin demuestra el compromiso que tiene la institución para que el tema sea una prioridad en la agenda institucional".

Y añadió: “Hay muchos países de América Latina donde hay una resistencia muy grande de los fiscales para ir a las cárceles. Les parece que su rol termina cuando los detenidos ingresan en el penal. Pero ellos tienen, además, el deber de proteger los derechos de todos los ciudadanos que son también aquellos que están privados de su libertad”.

Finalmente, el Secretario General de Asociación para la Prevención de la Tortura, Mark Thomson, demostró su apoyo a esta una nueva tendencia a nivel nacional, provincial y regional y la calificó de “muy positiva”.

“Creemos que Argentina puede mostrar un buen ejemplo de cómo combatir la tortura”, concluyó.