La Dirección General de Acompañamiento, Orientación y Protección a las Víctimas (DOVIC) del Ministerio Público Fiscal de la Nación y la Oficina de Violencia Doméstica (OVD) de la Corte Suprema de Justicia de la Nación participaron de un espacio de intercambio en el cual difundieron y reflexionaron acerca de las estadísticas de los servicios de atención a víctimas de ambos organismos. A su vez, compartieron experiencias con el fin de mejorar la calidad de la información producida para el desarrollo de políticas públicas.

El encuentro “Detrás de los números: reflexiones sobre el trabajo con estadísticas sobre víctimas”, se llevó a cabo el lunes pasado en el auditorio de la sede de la Procuración General de la Nación, en la calle Perón 667 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La presentación contó con la presencia del secretario de Coordinación Institucional de la Procuración General de la Nación, Juan Manuel Olima Espel; de la titular de la DOVIC, Malena Derdoy; la secretaria ejecutiva de esa misma dirección, María Teresa Bravo; y la titular de la OVD, María Emilia Sesin. También expusieron las sociólogas Magdalena Marlow (OVD) y María Eugenia Munne (DOVIC).

Durante las palabras iniciales, Derdoy agradeció la presencia de Olima Espel y el apoyo que brinda a la dirección. Al referirse a sus pares de la oficina de la Corte Suprema, destacó el profesionalismo con el que se desempeñan y la sinergia lograda gracias al trabajo cotidiano de articulación entre ambas oficinas. “La OVD siempre ha sido una brújula”, agregó en relación al camino recorrido por la DOVIC desde hace once años.

Olima Espel hizo mención a la importancia de sentirse parte de un equipo en el que “todos tiramos para el mismo lado” y ponderó el diálogo y el intercambio de datos entre ambas oficinas de la Corte Suprema de Justicia y la Procuración General de la Nación “en un contexto de un mundo y un país con tanta falta de consensos”.

Asimismo, señaló que los informes elaborados por la DOVIC y la OVD “nos permiten ver dónde reforzar, incluso por fuera de las instituciones, y a su vez sirven a la hora de la elaboración de políticas públicas”.

En otro tramo de su exposición, valoró las tareas desarrolladas por ambos organismos y remarcó que las intervenciones de la DOVIC contribuyen a sensibilizar a la estructura judicial, que “necesita escuchar más a las víctimas”. Esa perspectiva, indicó, fortalece la confianza en el sistema de justicia como una herramienta con enfoque multidisciplinario.

Por su parte, Sesin también hizo hincapié en la importancia de poder contar con informes estadísticos ya que, según dijo, “es fundamental la sistematización de los datos y es lo que nos va a permitir ser efectivos en el abordaje”. Luego, ponderó el trabajo que realiza la DOVIC y afirmó: “Para nosotras la DOVIC también es un faro”.

En tanto, Marlow señaló que “en el Poder Judicial no hay una cultura afianzada de estadísticas” y aseguró que los datos arrojados sirven tanto para el uso interno como para el uso externo. “Respecto del uso interno, esos datos sirven para la orientación de recursos, los tipos de violencia más denunciados, las características de las personas afectadas, los niveles de riesgo que existen, entre otras”, consideró. A su vez, subrayó que es sobre esa base de datos que después se pueden elaborar políticas públicas.

A su turno, Bravo resaltó la importancia de compartir  información y el análisis de los datos de los informes elaborados por ambos organismos y puntualizó: “Nuestra tarea es, también, rendir cuentas a la sociedad de nuestro trabajo”.

Luego se refirió a las etapas del proyecto de gestión de la información en el que vienen trabajando desde 2019, como también a los desafíos que tienen por delante.

Integrantes de ambas oficinas de asistencia a las víctimas formularon consultas y compartieron experiencias. Foto: M. Pellón

Las cifras de la OVD y de DOVIC

Marlow repasó los números más importantes del informe de la OVD no sin antes advertir que “solo el 5% de las situaciones de violencia llegan a ser denunciados”. También mencionó que, a lo largo de los 16 años de la OVD, se realizaron más de 147 mil denuncias y destacó que desde el organismo realizan un seguimiento judicial para saber cómo avanzó cada proceso. “Eso nos permite ver qué tipo de denuncia llegó a qué término”, explicó.

A su turno, Munne desglosó los principales puntos del informe estadístico anual de la DOVIC, que comprende el período entre el 1º de diciembre de 2023 y el 30 de noviembre pasado, para poner “en espejo” algunos de los datos contemplados en el informe de la OVD.

Destacó que las víctimas acompañadas por la DOVIC en estos años han sido mayoritariamente mujeres adultas, un aspecto que resulta compartido por ambas oficinas.  En relación a los delitos y las violencias con las cuales suelen encontrarse en DOVIC, indicó “el abuso sexual es el que más venimos trabajando, y en los últimos años vienen creciendo las solicitudes de acompañamiento que recibimos sobre ese tipo de delito”.

Derdoy retomó la palabra y reflexionó acerca del desafío que implica hacer que los datos reflejen todo el trabajo que realizan. En esa línea, aseguró: “Estamos trabajando en las narrativas y en nuestro quehacer cotidiano para ver cómo hacer hablar esos números. Es interesante no solo seguir pensando nuestras prácticas sino cómo contarlas”.

Al finalizar la presentación, se produjo un espacio de intercambio donde integrantes de ambas oficinas formularon consultas y compartieron experiencias. Se enfatizó en las coincidencias no solo en los datos estadísticos sino también en los procesos de trabajo y en la importancia de elaborar y difundir informes de calidad.