En la última audiencia del juicio oral y público contra una familia acusada de explotar sexualmente a dos adolescentes en el barrio porteño de Constitución se reprodujeron las declaraciones de las víctimas a través de cámara Gesell, las cuales se realizaron durante la etapa de instrucción. En esa oportunidad, ambas dieron detalles de cómo fue la modalidad del clan familiar que actúo con la finalidad de explotarlas sexualmente.

Ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°8 de la Capital Federal y el fiscal general Marcelo Colombo, se expusieron los videos con la presencia en la sala de los principales imputados.

La primera de las víctimas relató que se puso de novia con Leandro Landriel -uno de los acusados- estando en la provincia de Santa Fe y que juntos se fueron a vivir a un hotel ubicado en el barrio porteño de Flores. En esa oportunidad, viajaron también la madre de su novio y su hermana. Admitió que fue obligada a ejercer la prostitución, que fue explotada sexualmente y mencionó a toda la familia de su pareja como parte de la banda.

Por su parte, la otra víctima indicó que se fueron a vivir a Santa Fe ni bien lo conoció a Leandro. “Me presentó a sus padres y a su hermana. Me quedé ahí y comíamos todos juntos”, expresó la joven. Una noche, mientras estaban cenando, escuchó cómo los padres le decían a su hijo: “¿Por qué no la mandás a laburar como hacés con todas tus mujeres? Mandala a laburar”.

“Él no trabajaba. Vivía todo el día encerrado, jugando a la Play y drogándose con los amigos. Yo le pregunté, quería saber cómo quería que yo laburara”, continuó la joven.

Además, indicó que la madre de Landriel también se prostituía y que era la persona que le daba todas las órdenes. “Ella me decía cuánto había que cobrar porque yo nunca había hecho eso. Ella me explicaba”, agregó la víctima. “Una vez que aprendas ya te vas a venir [a prostituir] sola”, indicó la testigo que le decía la mujer.

La joven aseguró que intentó irse muchas veces pero que su pareja no la dejaba. “Siempre lo tenía cerca y no me podía escapar, me encerraba”, agregó la víctima. “El padre, el hermano, eran todos iguales. Mandaban a prostituir a sus mujeres”, añadió.

El juicio comenzó el 8 de agosto y se reanudará el próximo viernes 15 de septiembre. Los acusados son un clan familiar integrado por un hombre, una mujer y sus dos hijos. También es juzgada en el mismo debate la madre de una de las víctimas, acusada de haberla ofrecido para que fuera explotada sexualmente.