El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°5 dispuso el procesamiento con prisión preventiva de 14 personas investigadas por el contrabando y la comercialización de automotores de lujo con pedidos de secuestro y embargados. En representación del Ministerio Público Fiscal interviene el fiscal federal Juan Pedro Zoni, que tuvo la causa delegada hasta los allanamientos masivos realizados a fines de agosto.

La resolución del juez Marcelo Martínez de Giorgi es por una amplia gama de delitos imputados a diversas personas, según el caso, e incluye embargos de hasta casi 50 millones de pesos. A saber: asociación ilícita -para todos los acusados-; estafa; uso de documentación apócrifa destinada a acreditar la titularidad de vehículos automotores y encubrimiento con ánimo de lucro; tenencia ilegítima de armas de guerra y de uso civil; falsificación y uso de documentos públicos destinados a acreditar la titularidad de dominio o habilitar la circulación de vehículos automotores; contrabando y lavado de activos de origen ilícito.

Los 28 allanamientos oportunamente realizados -con intervención de la División Sustracción de Automotores de la Policía Federal Argentina- en la Ciudad de Buenos Aires, La Plata, Marcos Paz, Merlo y los barrios privados Montecarlo y San Isidro Labrados Country Club, entre otras localidades, culminaron con el secuestro de más de un centenar de autos, camionetas y motos, armas, documentación y elementos para su falsificación. Hummer, Dodge Viper, Harley Davidson, BMW X6 y Ford Mustang son tan sólo algunos ejemplos de los vehículos comercializados ilegalmente.

El magistrado dispuso, además, “transformar en prisión preventiva la detención que vienen sufriendo los imputados” desde los allanamientos. Al respecto, indicó que “tendrían a su disposición los medios económicos y vínculos que les permitirían fácilmente ausentarse de sus domicilios, como también, el abandono de nuestro país”; asimismo, consideró importante que “en la actualidad la pesquisa no ha logrado dar con la totalidad de las personas que participaron en los hechos investigados”.

La hipótesis que se sigue en la pesquisa es que la banda compraba autos robados, embargados y contrabandeados desde los Estados Unidos -a los que se les preparaba la documentación apócrifa-, y que luego los vendían. De todos los vehículos incautados, alrededor de 25 -de alta gama- serían los importados ilegítimamente. La modalidad consistía en introducirlos en contenedores con otra documentación para simular que correspondían a mudanzas de ciudadanos extranjeros y así eludir los controles aduaneros.

Embargos

Por otro lado, Martínez de Giorgi dispuso embargos por un total de 48 millones de pesos. En ese sentido, recordó que la naturaleza cautelar del embargo “tiene como fin garantizar en medida suficiente una eventual pena pecuniaria, las costas del proceso y el aseguramiento de las responsabilidades emergentes”.

Blanqueo de dinero en el casino

En cuanto al lavado de dinero de origen ilícito que se le endilga a algunos de los acusados, habría consistido en “simular falsas apuestas en casinos para la obtención de certificados del organismo de control fiscal”.