El fiscal federal Jorge Gustavo Onel imputó a seis personas por considerarlos autoras del delito de “causación dolosa de incendios, con peligro para los bienes”. Se trata de hechos que ocurrieron el 30 de julio y el 5 y 9 de agosto en las islas Las Ánimas, Los Cuatro Hermanos y La Manzana, respectivamente.

Luego de una investigación preliminar (IP), la Fiscalía Federal Nº1 de Santa Fe a cargo de Jorge Gustavo Onel denunció y solicitó las declaraciones indagatorias de seis personas por incendios en tres islas del Río Paraná ocurridos en julio y agosto.

La pesquisa arrojó como resultado la constatación de al menos veinte focos ígneos en distintas islas y campos de esta jurisdicción, respecto de algunos de los cuales el representante del Ministerio Público Fiscal consideró que se colectaron suficientes elementos de juicio para formular la imputación penal. En concreto, por hechos ocurridos en las islas Las Ánimas, Los Cuatro Hermanos y La Manzana.

El fiscal federal remarcó que la ubicación de las islas objeto de la investigación, la posible afectación de recursos naturales con alcance interjurisdiccional, así como el eventual compromiso de la circulación por cualquier vía, justifican la competencia territorial y por la materia de la jurisdicción federal.

La pesquisa comenzó el 18 de julio por la quema de pastizales en las islas del Río Paraná. Se dio intervención a Gendarmería Nacional, Prefectura Naval Argentina y la Secretaría de Protección Civil de la provincia de Santa Fe, quienes sobrevolaron en helicóptero la jurisdicción para hacer una evaluación actualizada de la situación; se les hizo saber a los titulares de las fuerzas federales que debían articular entre ambas, de acuerdo con las posibilidades existentes en materia de recursos humanos y técnicos, una labor coordinada que abarcara la totalidad de las áreas afectadas para que llevaran a cabo todas aquellas diligencias tendientes a la comprobación de comisión de delitos penales de acción pública, a fin de lograr la individualización de sus presuntos autores.

Además, se les indicó que actuaran de oficio en lo sucesivo en cumplimiento de las normas procesales vigentes, relativas a la cesación de delitos de acción pública en curso.

En  base a la información reunida por las diferentes fuerzas, se pudo constatar -hasta el momento- la presunta autoría de tres focos de incendio diferentes:

-Uno ocurrido el 30 de julio, por el que el MPF imputó a dos personas haber causado un incendio en la Isla Las Ánimas, con peligro común para los bienes. Para ello se valoró que serían los poseedores de la única “ranchada” relevada por las fuerzas actuantes, y que en ese lugar se desarrolla la actividad ganadera, lo que permite inferir la relación de autoría.

 -Un segundo episodio que tuvo lugar el 5 de agosto en la Isla La Manzana, como consecuencia de un foco ígneo originado en la Isla Las Flores Este, que se encuentra bajo cuidado del imputado y que linda con la anterior, con peligro común para los bienes. Allí se produjo la quema de gran parte de la isla.

-Por el tercero la fiscalía federal identificó a otros tres hombres: el incendio fue el domingo pasado en la Isla Los Cuatro Hermanos. Uno de los acusados manifestó ser uno de los propietarios y que el incendio había sido realizado por ellos mismos, con la intención de limpiar las malezas naturales para posteriormente colocar un cercado para animales bovinos. Se dejó constancia que la dimensión de los pastizales quemados se podía medir en unos 150 metros cuadrados, aproximadamente, y que al momento de finalizar el acta el foco se encontraba extinguido.

Onel formuló la denuncia junto al pedido de indagatorias ante el Juzgado Federal Nº1 de Santa Fe. En la presentación destacó “el esfuerzo puesto de manifiesto tanto por la Prefectura Naval Argentina como por la Gendarmería Nacional  y Protección Civil de la provincia en las tareas que le fueran encomendadas”.

En cuanto al tipo penal en el que se encuadraron las conductas, el fiscal señaló la aplicación de la noción de “fuego peligroso” -aceptada doctrinariamente-, que adquiere una entidad tal que escapa al control de aquél que lo genera, lo que es propio de todos los delitos contra la seguridad pública. Además se vincula con la expansibilidad del fuego, que implica la posibilidad cierta de que se extienda a bienes distintos de aquel en que se originó y se tuvo por acreditado en los sucesos, en relación al ganado existente en los lugares y el medio ambiente en general.

Finalmente Onel señaló, con respecto a los hechos que habrían ocurrido en el mes de agosto cuando no se encontraba en turno, que es pertinente la tramitación en una única sede judicial con el objeto de garantizar una más rápida y eficaz administración de justicia.