El titular de la Fiscalía de Distrito de los barrios de Nueva Pompeya y Parque Patricios, Adrián Giménez, solicitó la indagatoria por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público de siete efectivos de la Prefectura Naval Argentina, que realizaban patrullajes el 7 de septiembre de 2013 cuando Kevin Molina, de 9 años, fue asesinado por una bala perdida en el interior de su domicilio, en el barrio Zavaleta.

En su requerimiento, el fiscal Giménez consideró que el día del hecho los patrulleros fueron desplazados al lugar por el Comando Radioeléctrico, en virtud de reiterados llamados telefónicos que alertaban sobre una serie de tiroteos en el barrio.

Sin embargo, los oficiales no habrían permanecido el tiempo suficiente para determinar la procedencia de los disparos e intervenir, por lo que los enfrentamientos siguieron su curso. El nene estaba refugiado en su propia vivienda, acurrucado debajo de una mesada desde que comenzó el segundo tiroteo. Allí lo encontró su mamá, ya herido de muerte por un disparo que impactó en su cabeza.

Ahora el juez interinamente a cargo del Juzgado Nacional en lo Correccional N°14, Luis Schelgel, deberá determinar sí hace lugar al requerimiento de la fiscalía e indaga a los oficiales, en orden al delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público, previsto en el artículo 249 del Código Penal de la Nación.