"Nos casamos en el 99 y todo empezó cuando quede embarazada. El empezó a tomar, cada vez más. Empezó a maltratarme. Era muy violento, me amenazaba, con que me iba a pegar o golpear. Durante mucho tiempo fue el maltrato verbal y alguna que otra violencia, con algunos golpes. Una vez me golpeo mucho pero yo no lo denuncié. Eran empujones y mucho maltrato verbal. Eso duró 5 años, desde el 2000 y hasta el 2005."  Así narra parte de los hechos la mujer víctima de una historia de violencia, que entre los años 2007 y 2009 denunció haber sido obligada a mantener relaciones sexuales con acceso carnal vaginal, siempre contra su voluntad y mediante el uso de la violencia.

Se trata de una pareja de nacionalidad paraguaya, un elemento que fue clave para que la justicia a cargo del Tribunal Oral Criminal Nº 16 absolviera al marido de la víctima, aludiendo a las características machista de la cultura de Paraguay. Dice el fallo: "las exigencias efectuadas a .... habrían sido realizadas con el claro convencimiento de que tenía el derecho de hacerlo. En ningún momento se presentó en forma efectiva el disvalor de su comportamiento y del resultado que le ocasionaba. Efectivamente conocía que el abuso sexual con acceso carnal en sí es un delito, más lo creía inaplicable cuando se tratara de su esposa, puesto que ella debía corresponderlo".

Así, mientras la fiscalía solicitó condenar al acusado con 8 años de prisión, acusado de ser autor del abuso sexual doblemente agravado, la justicia decidió absolver al imputado tras considerar que no había pruebas suficientes (Ver mas información acá)

En el caso trabajaron de manera conjunta el fiscal de la causa Fernando Fiszer y el Programa de Género del Ministerio Público Fiscal y presentaron un recurso de casación a los fines de revertir esta historia. 

Los fundamentos son muchísimos. Desde el Programa de Género, por ejemplo, se advierte habitualmente la necesidad de conocer algunos componentes claves que se hallan en este tipo de maltratos y conocer el ciclo de violencia por el que atraviesan las víctimas. El Síndromes de la Mujer Maltratada, el Síndrome de la Indefensión Aprendida y la dependencia, son algunos de los efectos que permiten acceder a muchos interrogantes que suelen aparecer como: ¿por qué la mujer no denuncia estos hechos?,  ¿por qué la mujer no se separa?, ¿por qué muchas veces después de la denuncia reinicia el vínculo con su agresor?,  ¿por qué lo denuncia y luego se retracta?

También se cuenta con normativa local e internacional que amparan y protegen a las mujeres victimas de violencia de género. En este sentido, el fiscal expresó que acreditar la violencia por tratarse de cuestiones de pareja, no solo es desoír la palabra de la víctima, circunstancia por demás revictimizante, sino al mismo tiempo, constituirse en agentes del incumplimiento de las obligaciones internacionales del  Estado argentino en cuanto esta obligado a prevenir, investigar y sancionar la violencia contra la mujer.