El juicio oral y público al expolicía Mario Alfredo Sandoval, acusado por su presunta responsabilidad en el secuestro y los tormentos sufridos por el desaparecido Hernán Abriata, continuó ayer con las primeras declaraciones brindadas en el debate. La esposa y la hermana de la víctima declararon ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°5 porteño durante la segunda audiencia del proceso, que comenzó el miércoles 14 de septiembre.
Los testimonios de las mujeres -ambas presentes al momento del secuestro de la víctima- se produjeron luego de que Sandoval ampliara su declaración indagatoria. La semana pasada, el imputado había afirmado que este miércoles respondería preguntas del presidente del tribunal, Fernando Canero, pero ayer dijo que, por consejo de su defensa, definiría la continuación de su exposición después de que declaren todos los testigos.
Sandoval, ex miembro de la Policía Federal, está acusado de haber integrado el grupo de tareas 3.3.2, que actuó en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) y que intervino en el secuestro de Abriata el 30 de octubre de 1976. El imputado es ciudadano argentino y francés. En 2019 fue extraditado desde Francia para ser juzgado por estos hechos.
Hernán Abriata tenía 24 años al momento de los hechos. Era estudiante de arquitectura y militante de la Juventud Universitaria Peronista. En la causa ESMA Unificada se acreditó que, tras su secuestro, fue llevado a la ESMA, donde permaneció clandestinamente detenido bajo condiciones inhumanas de vida, encapuchado, engrillado, y esposado, y que fue sometido a otras torturas.
El juicio continuará el miércoles 5 de octubre con las declaraciones de otros testigos.