El fiscal subrogante de Jujuy, Pablo Pelazzo, adelantó que la Fiscalía recurrirá la absolución de dos ex penitenciarios federales dictadas ayer en el juicio seguido a 12 ex carceleros y a un militar por los crímenes de lesa humanidad cometidos contra 90 víctimas trasladadas en avión desde un penal de aquella provincia a cárceles de La Plata y de la Capital Federal. El funcionario también señaló que también será cuestionada ante la Cámara Federal de Casación la absolución por el delito de tormentos que benefició al militar acusado.
En la tarde de ayer, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Jujuy condenó al entonces teniente primero del Ejército Horacio Domingo Marengo a la pena de doce años de prisión por el delito de privación ilegítima de la libertad agravada por haber sido cometida con violencia y amenazas en 90 casos. En el veredicto, los jueces omitieron pronunciarse acerca de la acusación por tormentos en la misma cantidad de casos que había realizado la Fiscalía, razón por la cual el futuro recurso de los representantes del Ministerio Público también incluirá este punto, adelantó el fiscal, quien, junto a su colega Francisco Snopek, había pedido que se condenara a 16 años de prisión al uniformado.
Los jueces Mario Juárez Almaraz, Gabriel Casas y Federico Díaz dispusieron además la condena a 14 años de prisión para los ex penitenciarios Juan Carlos Pugni, Osvaldo Jorge Chiapparo, Jorge Néstor Ibáñez, Arnaldo Exequiel Jorge, Eduardo José Juárez, Ricardo César Juárez, Rogelio Lorenzo Masson Iglesias, Jaime Oscar Quintela, Cristóbal José Antonio Retamoso y Andrés Aldo Savorani por los delitos de privación ilegal de la libertad y tormentos agravados por tratarse la víctima de un perseguido político en 78 hechos. Las penas y las calificaciones coincidieron con las solicitadas por Snopek y Pelazzo.
Estas condenas tuvieron la disidencia del juez Casas "en lo relativo a la existencia del delito de privación ilegítima de la libertad". Los fundamentos de las posiciones comunicadas ayer por los jueces se darán a conocer el 14 de septiembre a las 14:30.
Por otro lado, los jueces también absolvieron "por el principio de la duda" a los ex penitenciarios Héctor Guenchal y Rubén Eduardo Zink y dispusieron su inmediata libertad.
"A las dos absoluciones las vamos a recurrir. Es porque en sus legajos no estaba asentado el vuelo. El argumento nuestro es que existe un informe agregado al expediente donde consta que estas dos personas estuvieron en el vuelo", explicó el fiscal Pelazzo.
El Tribunal resolvió además mantener la prisión preventiva efectiva -la mayoría está alojada en el penal federal de Güemes- respecto de los 11 condenados y dispuso que peritos médicos forenses de la Corte Suprema "los revisen a efectos de que informen si se encuentran en condiciones de salud para permanecer internos en unidades penitenciarias".
Un juicio singular
El fiscal Pelazzo remarcó la particularidad del debate que comenzó el 6 de noviembre pasado, pues trató sobre las violaciones a los derechos humanos en "el traslado masivo de 90 presos políticos para reubicarlos en otros penales" el 7 de octubre de 1976. No hay antecedentes de juicios que traten crímenes en ese contexto.
El condenado Marengo se desempeñaba a la época de los hechos como teniente primero del Regimiento 20 de Jujuy y había tenido activa participación durante el Operativo Independencia, la experiencia localizada del terrorismo de Estado implementada en Tucumán y la región un año antes del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976. El 7 de octubre de ese año, Marengo tuvo a su cargo el traslado terrestre desde el penal de Gorriti de 78 hombres y 12 mujeres que fueron subidas en la capital provincial a dos aviones: los hombres, a un Hércules de la Fuerza Aérea, mientras que las mujeres, a una nave de menor porte.
El traslado de los prisioneros y prisioneras estuvo a cargo de los agentes del Servicio Penitenciario Federal. Las víctimas fueron esposadas al piso del avión mientras los penitenciarios caminaban o se sentaban sobre ellos y los golpeaban con sus bastones, al tiempo que los despojaban de las pertenencias que llevaban con ellos, relataron las víctimas.
Al arribar a una base aérea metropolitana, las mujeres fueron conducidas al penal de Devoto, en Buenos Aires, mientras que los hombres fueron encerrados en la Unidad Penal N° 9 del Servicio Penitenciario Bonaerense, en La Plata. El estado de salud de algunas víctimas era tal que, a su llegada a los penales, fueron directo a la enfermería.