En línea con la solicitud del fiscal general subrogante Luis Benítez, el Tribunal Oral Federal de Formosa, integrado por las juezas Rocío Alcala, Noemi Marta Berros y el juez Osvaldo Alberto Facciano, revocó la prisión domiciliaria del ex segundo comandante de la Gendarmería Nacional Horacio Rafael Domato, luego de que una empleada doméstica lo denunciara por abuso sexual, el pasado 23 de julio.
El Tribunal Oral formoseño ordenó el traslado de Domato a una unidad penitenciaria y que se comunique a la Dirección de asistencia a personas bajo vigilancia electrónica del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, a fin de dejar sin efecto el trámite de la tobillera electrónica.
En 2016, el ex segundo comandante de la Gendarmería Nacional fue condenado a la pena de 25 años de prisión como coautor de los delitos de asociación ilícita, cuatro hechos de tormentos seguidos de muerte, veintiséis casos de privación ilegítima de la libertad agravada y veinticuatro de tormentos agravados. En su momento, solicitó cumplir su condena bajo la modalidad de arresto domiciliario pero el Tribunal Oral Federal formoseño se lo negó.
Sin embargo, en el marco de la pandemia por el virus COVID-19, el ex gendarme de 78 años solicitó nuevamente cumplir su condena bajo la modalidad de prisión domiciliaria, dado que tiene un hijo con discapacidad y su mujer padece una enfermedad que la hace “paciente de riesgo”. El beneficio le fue concedido por el mismo tribunal el 3 de marzo de 2020.
El 23 de julio pasado, una mujer que trabajaba en la casa de Domato lo denunció por abuso sexual sin acceso carnal y violencia de género, en virtud de lo cual el Juzgado de Instrucción N°2 del Poder Judicial de la provincia de Formosa dispuso la prohibición de acercamiento a la víctima, su exclusión del hogar y su detención en la Comisaría Primera de la Policía formoseña.
Al tomar conocimiento de lo ocurrido, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos Regional Formosa junto a otros organismos solicitaron revocar la prisión domiciliaria de Domato, pedido que fue acompañado por el fiscal Benítez, quien requirió que el condenado fuera alojado en la Unidad Penitenciaria N°10 de esa provincia.
En su presentación, el fiscal sostuvo que “el Sr. Horacio Domato, cumpliendo una pena -en la comodidad de su domicilio- no ha respetado los parámetros de buen comportamiento, cometiendo un delito que atenta contra la mujer y cuyo daño se expande al colectivo femenino y a toda la comunidad”, por lo cual entendió que debía revocársele el beneficio oportunamente concedido, dado que cometió un nuevo delito y alteró las condiciones por las cuales le otorgaron la prisión domiciliaria.