El Tribunal Oral Federal 2 de San Martín comenzó hoy el juicio contra Luis Abelardo Patti, el exoficial subinspector de la Comisaria de Escobar, acusado por el homicidio del exdiputado Diego Muñiz Barreto y el intento de homicidio de su secretario Juan José Fernández, ocurridos durante la última dictadura cívico militar. La imputación de esos delitos había sido rechazada en 2011 durante la instrucción de la causa, lo que finalmente fue revertido, luego de distintas instancias judiciales, por la Corte Suprema de Justicia de la Nación. En representación del Ministerio Público Fiscal interviene en el debate el auxiliar fiscal Iván Polaco.
Los jueces Walter Venditti, Matías Alejandro Mancini y Esteban Rodríguez Eggers iniciaron la audiencia, que se realizó de forma virtual, con la lectura de la síntesis de los requerimientos del MPF, de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y de la Subsecretaria de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires.
En la lectura del requerimiento fiscal, se narraron los hechos que se le imputan a Patti, al que se le endilgó “haber formado parte del engranaje del plan sistemático del Terrorismo de Estado por haber cumplido funciones desde el 4 de enero de 1972 hasta el 7 de marzo de 1977 en la Comisaria de Escobar de la Policía de la Provincia de Buenos Aires".
Según el requerimiento fiscal, el exdiputado Muñiz Barreto y el secretario Fernández fueron secuestrados y privados de su libertad en la Comisaria de Escobar el 16 de febrero de 1977. Allí permanecieron hasta el 18 de febrero. Luego fueron trasladados a otra dependencia policial en la localidad de Tigre, donde permanecieron dos horas y en la que fueron esposados y desvestidos. Posteriormente fueron llevados al centro clandestino de detención Campo de Mayo, donde fueron golpeados y sometidos a simulacros de fusilamiento.
De acuerdo a la acusación, luego del cautiverio, se pergeñó un plan para intentar simular los homicidios a través de un simulacro de accidente automovilístico. En ese sentido, el 6 de marzo de 1977 las víctimas fueron llevadas hasta la provincia de Entre Ríos, donde fueron adormecidos y colocados en un auto que arrojaron al rio Paraná con la intención de fraguar un accidente. A raíz de ello, falleció Muñiz Barreto y sobrevivió Fernández, quien pudo escapar del interior de auto.
Tras la lectura de los requerimientos, la defensa del imputado hizo un planteo preliminar por doble juzgamiento hacia su representado. Por este motivo, el Tribunal le pidió opinión a las partes antes de resolver. El auxiliar fiscal respondió que debía ser rechazado el planteo por insustancial e hizo un recorrido del derrotero judicial en el que reiteradamente se rechazó el argumento presentado. El juicio continuará el próximo viernes.
Proceso judicial
En este tramo de la causa se juzgan los delitos por los que no había llegado a ser imputado en la instrucción de la causa en 2011. Aquella vez, Patti había recibido condena por ser responsable de la "privación ilegítima de la libertad, cometida por abuso funcional agravada por el empleo de violencia y amenazas e imposición de tormentos, agravado por ser la víctima un perseguido político", en perjuicio de las dos víctimas.
En 2014, el procurador fiscal ante la Corte Suprema, Eduardo Casal, dictaminó que correspondía juzgar a Patti por la muerte de Muñiz Barreto y la tentativa de homicidio de Fernández. Allí concluyó que había que dejar sin efecto la sentencia de la Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal, que había rechazado el recurso fiscal interpuesto. Finalmente, la Corte hizo lugar al pedido del MPF y de las querellas y resolvió que sea juzgado por esos dos delitos.