La Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX) elaboró un reporte de los casos ingresados durante este 2020 en la Línea 145 –que recibe denuncias en todo el país de manera gratuita y anónima, si así se lo prefiere-, en el que se advierten cambios en los datos estadísticos, a raíz de los períodos de aislamiento y distanciamiento social, preventivo y obligatorio que se decretaron en el país producto de la pandemia por coronavirus. "A medida que se endurece el aislamiento baja la cantidad de denuncias recibidas", indicó la Procuraduría especializada, y explicó: "es posible trazar la hipótesis de que el aislamiento tuvo mayor impacto en la explotación sexual de personas que en la explotación laboral o de otro tipo".
Desde inicio del año y hasta el 19 de julio se recibieron un total de 344 denuncias. El corte responde a que en esa fecha el Área Metropolitana de Buenos Aires y otros distritos finalizaron su retorno a la Fase 2 del aislamiento social, preventivo y obligatorio (ASPO), mientras que el resto del país continuó en período de distanciamiento social, preventivo y obligatorio (DSPO). El informe da cuenta de qué manera se modificó el volumen de denuncias en términos totales, por zona del país y por tipo de hecho a medida que las distintas provincias avanzaban por cada una de las fases que hasta entonces atravesó Argentina.
La Línea 145 es uno de los principales canales de denuncias de trata de personas y/o delitos conexos del país, situación que en el actual contexto de aislamiento quedó de manifiesto por ser la vía de inicio de un 82 por ciento de los casos de trata, conforme respondieron las fiscalías federales en la encuesta a nivel nacional realizada por PROTEX.
La evolución del ingreso de denuncias en la línea refleja la caída de la cantidad de llamados atendidos y derivados, a partir del decreto 297/2020 que dio comienzo al aislamiento.
La Línea 145 es la vía de inicio de un 82 por ciento de los casos de trata, de acuerdo con la información brindada por las fiscalías federales en la encuesta a nivel nacional realizada por PROTEX.
Sin embargo, el descenso en la cantidad de denuncias no fue lineal. “Este se modificó junto con las distintas fases del ASPO y el DSPO de modo tal que el promedio de denuncias diarias alcanzados antes del ASPO –entre 1° de enero y el 19 de marzo- fue el más alto del 2020 con 4,63 diarias, seguido por el valor alcanzado cuando todo el país estuvo en la Fase 3 (entre el 11 de mayo y el 7 de junio) con 4,57 diarias. Contrariamente, los registros más bajos de denuncias diarias se observan cuando AMBA y otros distritos se mantuvieron en Fase 3 entre el 8 y el 28 de junio y retornaron a Fase 2 entre el 29 de junio y el 19 de julio, con 1,75 y 2 denuncias diarias respectivamente; y durante la Fase 1 del ASPO entre el 20 de marzo y el 26 de abril con 2,35 denuncias diarias”.
De acuerdo al análisis realizado desde PROTEX, estos números reflejan algo lógico: “A medida que se endurece el aislamiento baja la cantidad de denuncias recibidas, situación que puede obedecer a la menor capacidad de detección de casos producto de la menor circulación de personas en la vía pública y/o a la menor cantidad de hechos propiamente dichos producto de la misma circunstancia y de la prohibición de realizar determinadas actividades productivas”.
El reporte indica que esta conclusión, de todos modos, debe ser matizada puesto que las distintas zonas del país no atravesaron las distintas fases del ASPO y el DSPO de manera uniforme. Tal es así que se presenta la “paradoja” de que el menor promedio diario de denuncias se registró mientras que gran parte del país ya se encontraba en el DSPO, con excepción del AMBA y otros distritos.
“Tanto antes como después del comienzo del ASPO las denuncias por hechos presumiblemente vinculados a explotación económica de la prostitución ajena fueron superiores al resto. Sin embargo, la diferencia entre este tipo de denuncias y la sumatoria de todo el resto disminuyó de modo tal que mientras en el periodo que va del 1 de enero al 19 de marzo la diferencia alcanzó prácticamente un 100 por ciento, en los periodos posteriores está diferencia osciló entre el 0 y el 33 por ciento”, describe.
“En consecuencia, es posible trazar la hipótesis de que el aislamiento tuvo mayor impacto en la explotación sexual de personas que en la explotación laboral o de otro tipo, aunque ese impacto no haya implicado que dejen de existir denuncias por casos de aquella naturaleza”, analiza luego el informe.
"Los registros más bajos de denuncias diarias se observan cuando AMBA y otros distritos se mantuvieron en Fase 3 entre el 8 y el 28 de junio y retornaron a Fase 2 entre el 29 de junio y el 19 de julio".
La pandemia y las denuncias de trata laboral
En los dos primeros meses de aislamiento social, preventivo y obligatorio –entre el 19 de marzo y el 19 de mayo de 2020-, la Procuraduría recibió por parte del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las Personas Damnificadas por el Delito de Trata, del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, un total de 186 denuncias. Dentro de ese número, se encuentran aquellas que fueron derivadas para la intervención directa de PROTEX, y las que fueron judicializadas por el propio Programa, que coadministra la Línea.
En términos comparativos, ese número de denuncias ingresado resulta considerablemente menor al que ingresó el año pasado para la misma fecha. En efecto, un total de 333 denuncias ingresaron en el mismo periodo de 2019.
“La explicación de por qué nos encontramos ante una disminución de denuncias de esta índole, radica en que la línea es un canal para formular denuncias al alcance de todos los ciudadanos que, por un lado, perciban o detecten alguna situación que pueda estar relacionada con la comisión del delito de trata de personas o bien para aquellas personas que estén siendo víctimas del delito. Para que se dé la primera situación, es necesario que las personas se desenvuelvan tal como lo hacen cotidianamente en la comunidad y es así como pueden advertir o detectar los casos por los cuales terminan llamando a la línea”, analizaron desde la PROTEX.
Sin perjuicio de ello, se detectaron diferencias entre los dos primeros meses del aislamiento. Durante el primero se recibieron 70 denuncias a la línea, y durante el segundo mes el número se incrementó a 116. Una de las cuestiones que pudo influir en esta diferencia tiene que ver con el decreto 355/2020, que si bien prorrogó el ASPO, permitió mayores flexibilizaciones, dando origen a la “cuarentena administrada”.
Las denuncias por trata con fines de explotación sexual fueron 75 en esos dos primeros meses de ASPO, mientras que las denuncias por trata con finalidad de explotación laboral sumaron 38. De ese número, 18 fueron por situaciones de explotación laboral en campos en las provincias de San Juan, Neuquén, Río Negro, Mendoza, Corrientes, Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba.
Dos de las denuncias, en Corrientes y San Luis, tenían que ver con situaciones laborales en una casa de comidas y un supermercado. Al respecto, se analizó: “La circunstancia narrada se correspondía con una situación de irregularidad laboral más que con la comisión de un hecho delictivo. Todo ello, como consecuencia inmediata del aislamiento que trajo de la mano que muchos comercios perdieran sus clientes habituales y por ende no tuvieran los ingresos suficientes y los recursos para afrontar las cargas sociales de sus trabajadores/as, no teniendo otra opción que caer en la precarización laboral -si es que ya no estaban en esa situación o bien dejar de pagar los sueldos de los trabajadores-. En este sentido, entendemos que el cuadro de situación actual en el que se encuentra inmersa la sociedad comienza a desgastar cada vez más esa delgada línea que -difícilmente- permitía dilucidar si estábamos frente a la comisión de un delito o bien ante una situación de precariedad laboral”.
Las denuncias por trata laboral aumentaron en comparación con idéntico periodo del año pasado. Durante el primer mes de aislamiento se registró un porcentaje del 23,4 por ciento de denuncias por esta modalidad que contrasta con el 10 por ciento de 2019. Esa tendencia persistió dado que, al contemplar los primeros dos meses, los números se mantienen en un 20 por ciento este año, contra un 9,3 por ciento del año pasado.
A su vez, se informa que durante los primeros dos meses de ASPO se recibieron 20 denuncias por situaciones de captación a través de ofertas laborales engañosas, que utilizaron medios informáticos para su comisión.