Un funcionario y dos funcionarias de la Procuraduría contra la Violencia Institucional (Procuvin), la fiscal de instrucción de San Juan, Katya Troncoso, y el fiscal general de esa provincia, Mateo Berjmejo, inspeccionaron el penal de Chimbas, localizado en San Juan.
Por la Procuvin asistieron el coordinador del Área de Encierro, Roberto Cripriano García, y las funcionarias Ana Laura López y Paula Malimacci. También participaron representantes de la comisión de cárceles de la Defensoría General de la Nación, de la Procuración Penitenciaria de la Nación y operadores locales.
El procedimiento encabezado por la Procuvin se realizó en el marco de sus atribuciones para "disponer la realización de inspecciones en todos aquellos establecimientos en los cuales permanezcan personas privadas de su libertad a fin de controlar las condiciones de encierro, e instar acciones de protección y resguardo de su integridad", según la resolución PGN 455/13, que crea el organismo, firmada por la procuradora general, Alejandra Gils Carbó.
El penal de Chimbas es la cárcel donde fue brutalmente golpeado el 25 de junio pasado el detenido Federico Elías Fernández Santa Lucía, de 29 años, a raíz de lo cual fue internado. Un fuerte golpe en la cabeza le produjo pérdida de masa encefálica, y debido a la falta de atención médica adecuada sufrió un cuadro de meningitis por infección cerebral por la contaminación que le causó la introducción en el cráneo de un elemento filoso, presuntamente oxidado. Como secuela de aquella agresión, tiene problemas en el habla. La víctima luego fue alojada en le Departamento de Policía, donde también recibió una golpiza que le provocó la fractura del peroné de su pierna derecha.
Su padre, en tanto, fue baleado en su domicilio por dos hombres que le advirtieron que lo hacían en respuesta a las denuncias de los episodios padecidos por el joven.
El penal de Chimbas también tiene alojados a presos por crímenes de lesa humanidad. Desde allí gestionaron su traslados los militares Jorge Olivera y Gustavo De Marchi al Hospital Militar de Buenos Aires, de donde se fugaron el 25 de julio pasado.