Esta tarde, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Paraná condenó a César Augusto Vera a siete años de prisión por encontrarlo culpable del delito de captación, acogimiento y traslado de una joven de 19 años, con fines de su explotación sexual. Tal como había solicitado el fiscal general José Ignacio Candioti durante su alegato, los jueces consideraron que el acusado engañó y aprovechó la condición de vulnerabilidad de la víctima y que luego utilizó amenazas y violencia física durante las siguientes etapas de la comisión del delito.
También, hicieron lugar al dictado de la prisión preventiva solicitada por la Fiscalía y destacaron el peligro para la joven si el imputado recuperaba su libertad.
Durante el alegato, Candioti había calificado la conducta de Vera dentro de la normativa del artículo 145 bis, con la agravante del inciso primero del Código Penal, es decir, trata de personas agravada por ser el autor del delito la persona conviviente con la víctima. Por esto, había pedido la pena de ocho años de prisión, “atento la gravedad de las conductas juzgadas, el ostensible ‘encarcelamiento psicologico’ que había sufrido la joven y la circunstancia de que estamos ante un caso de lo que se llama ‘trata dura’, en la cual el autor aplica violencia física sobre la víctima para lograr su explotación sexual”, expresó. Por su parte, la defensa había pedido la absolución.
Durante el proceso, tuvo una participación activa la Dirección de Orientación, Acompañamiento y Protección a Víctimas (DOVIC), a través de la representante en Entre Ríos Noe González Igartúa, quien en todo momento brindó asistencia a la joven sometida por Vera.
Los hechos
Vera había llegado al juicio acusado de haber captado mediante engaño a una mujer de 19 años, a quien, mediante amenazas y violencia, obligaba a ejercer la prostitución en las calles de Paraná y en un hotel frente a la terminal de ómnibus de la ciudad. La víctima relató que Vera llegó a amedrentarla apuntándole a sus hijos con un arma de fuego calibre .9
El debate oral se pudo realizar gracias a que, días atrás, el fiscal general José Ignacio Candioti había solicitado a los jueces la detención de Vera, ya que el hombre ahora condenado había abandonado el domicilio sin denunciar uno nuevo. Por esto, luego de librada la orden de captura, la policía pudo aprehenderlo.