La fiscal federal María Cristina Beute, a cargo de la Fiscalía Federal N° 2 de Neuquén, y el fiscal federal Diego Iglesias, titular de la Procuraduría de Narcocriminalidad (PROCUNAR), le solicitaron al juez Gustavo Villanueva la elevación a juicio de siete integrantes de una organización narcocriminal liderada por un ex policía y de cuatro policías provinciales en actividad, que colaboraban con el tráfico de estupefacientes.
En su dictamen, los representantes del MPF indicaron que los imputados deberán responder en calidad de coautores de los delitos de tráfico ilícito de sustancias estupefacientes, en las modalidades de comercialización y tenencia con fines de comercialización, agravadas por haber intervenido en los hechos tres o más personas organizadas para cometerlos y por haber sido cometidos por funcionarios públicos.
La investigación de la fiscalía, que comenzó a principios del año pasado, tuvo la asistencia de un grupo integrado por la Policía Federal - División Antidrogas “Cipolletti” y la División Operaciones Federales- y por la Policía de la Provincia de Neuquén -Departamento de Seguridad Personal-, quienes se comunicaron en forma permanente y complementaron diligencias investigativas.
La banda narcocriminal
La organización, que fue desbaratada en diciembre del año pasado, estaba dirigida por un ex policía apodado “El Turco”, quien se desempeñó en el pasado en la Policía de la Provincia del Neuquén. Según la fiscalía, la banda, que funcionó al menos entre el 24 de junio de 2019 y el 3 diciembre de 2020, se dedicaba fundamentalmente a la comercialización de sustancias estupefacientes –principalmente clorhidrato de cocaína-, mediante la instalación de diversos puntos de venta en la zona sur de la ciudad de Neuquén.
Según la acusación, la banda contaba con la participación de cuatro policías, quienes informaban sobre procedimientos, proveían de drogas y armas secuestradas en otras pesquisas, e incluso impulsaban allanamientos fraudulentos en puntos de ventas de la “competencia”.
Además, la y el fiscal detallaron que la banda contaba con la participación de cuatro policías de la provincia del Neuquén, quienes les informaban sobre procedimientos, los proveían de drogas y armas secuestradas en otras pesquisas, e incluso impulsaban allanamientos fraudulentos en puntos de ventas de la “competencia” a pedido del líder de la banda. Por esa tarea, los cuatro agentes que prestaban funciones en la Dirección Antinarcóticos, la Comisaría N° 18, la Comisaría N° 3 y el Departamento de Delitos Contra la propiedad, recibían un “salario” semanal, que provenía de lo recaudado por la comercialización de los estupefacientes.
La investigación
El 5 de mayo de 2020, sobre la base de una serie de indicios surgidos sobre maniobras narcocriminales desarrolladas durante 2019 en un “bunker” ubicado en la ciudad de Neuquén, el Ministerio Público Fiscal inició la investigación preliminar. Para ello conformó un equipo de trabajo junto a las dependencias policiales citadas, a quienes se les encomendó la realización de diversas tareas de investigación.
Después de cuatro meses de tareas investigativas e intervenciones telefónicas, se pudieron develar elementos convincentes relativos a conductas delictivas protagonizadas por funcionarios de la Policía de la provincia del Neuquén, que el MPF estimó no sólo como un claro incumplimiento de sus deberes como funcionarios públicos, sino también, en connivencia con el comercio ilícito de sustancias estupefacientes que se desarrollaba en la ciudad.
En este marco, el 3 de diciembre del año pasado se realizaron 17 allanamientos en domicilios de la ciudad de Neuquén, Senillosa y Vista Alegre, así como en las dependencias policiales, que derivaron en la detención de nueve integrantes de la banda y el secuestro de aproximadamente un kilogramo de cocaína -ya fraccionado y listo para su venta-, más de medio millón de pesos, múltiples vehículos utilizados por la organización, armas de fuego y balanzas de precisión, entre otros elementos de interés.
La banda fue desbaratada en diciembre pasado, tras 17 allanamientos en domicilios de Neuquén, Senillosa y Vista Alegre
Posteriormente, el 22 de diciembre de 2020, el Juzgado Federal N° 2 de Neuquén procesó a los detenidos en orden al delito de tráfico de estupefacientes, en las modalidades de comercialización y tenencia con fines de comercialización. Con respecto a los tres integrantes faltantes, que ya habían sido observados durante las tareas previas a los allanamientos, dos de ellos fueron detenidos en un nuevo operativo realizado el 10 de febrero, mientras que el restante se encuentra prófugo, con pedido de captura.