El Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional Nº7 condenó a tres años de prisión condicional a los tres dueños del boliche “Beara” por considerarlos responsables de las muertes de Ariana Beatriz Lizarriaga (21) y Paula Leticia Provedo (20) y las heridas de las personas que asistieron al local la madrugada del 10 de septiembre de 2010, cuando se produjo el derrumbe del entrepiso. Los fundamentos de la sentencia se conocerán el próximo 3 de agosto.
Además, los jueces Alejandro Noceti Achaval, Gabriel Vega y Gustavo Alterini condenaron a tres años de prisión al maestro mayor de obras que dio el aval para la habilitación del local. No obstante, absolvieron a otras 13 personas, entre las que se encuentran ex funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y policías federales.
Por otra parte, ordenaron -en línea con lo que había planteado el fiscal Oscar Ciruzzi en su alegato- la extracción de testimonios para que se investigue la posible responsabilidad tanto de la arquitecta que supervisó la construcción del entrepiso como del maestro mayor de obras interviniente, los empleados y los gestores que llevaron adelante el trámite donde se aprobó la obra.
En el juicio, que había comenzado en febrero de este año, se juzgaron a 17 personas por lo ocurrido durante la madrugada del 10 de septiembre de 2010 dentro del local bailable -ubicado en la avenida Scalabrini Ortiz 1638-. Cerca de las 3.50, después del recital de los ex integrantes del grupo “Ráfaga”, parte del entrepiso del local colapsó y se derrumbó sobre la planta baja, lo que ocasionó las muertes de las chicas y las lesiones de los y las jóvenes que se encontraban allí esa noche.
Condenas y absoluciones
Juan Carlos María Yun, Agustin Dobrila e Iván Andrés Fliess eran socios en la empresa “El Viejo Sabio S.A.”, que se encargaba de explotar comercialmente el boliche Beara y también el local “Caramel”, ubicado al lado. Los tres fueron condenados por los delitos de “homicidio culposo agravado por el número de víctimas en concurso ideal con lesiones culposas y leves” y se les fijó una inhabilitación por cinco años para ejercer el comercio, en relación a las casas de fiestas y locales bailables “clase C”.
En esa línea, el Tribunal les impuso que por tres años deben fijar residencia y someterse al control de la Dirección de Control y Asistencia de Ejecución de la Pena. Esa misma condena y tiempo de inhabilitación se le fijó también al maestro mayor de obras Gustavo Amaru.
Con respecto a cuatro funcionarios del Gobierno de la Ciudad, el Tribunal ordenó sus absoluciones, aunque el fiscal Ciruzzi había solicitado condenas de tres años de prisión en suspenso. Se trata del ex responsable de la Dirección General de Habilitaciones y Permisos, Martín Diego Farrell; el ex director de Habilitaciones Especiales, Pablo Damián Saikauskas; el exjefe del Departamento de Esparcimiento, Norberto Cassano; y el arquitecto responsable de Verificaciones y Habilitaciones, Isaac Rasdolsky.
Los jueces absolvieron al comisario de la Policía Federal Argentina Rodolfo Cabezas y a los integrantes de esa fuerza Gustavo Flaminio, Luis Acosta y Julio González. También fueron absueltos el co-organizador del recital de aquella noche, Maximiliano Fratino; el encargado de Beara Agustín De Grazia; los gestores de “El Viejo Sabio” Leandro Camani y Matías Pantarotto. También se absolvió a la ex directora de Fiscalización y Control del Gobierno de la Ciudad, Vanesa Ileana Berkowski, quién no había sido acusada por la fiscalía.