11 de mayo de 2024
11 de mayo de 2024 | Las Noticias del Ministerio Público Fiscal
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Más de la mitad de las 18 víctimas fue asesinada o está desaparecida
Con la unificación de diez causas, arranca en Salta un nuevo juicio oral
Seis ex militares y policías llegan acusados por diferentes delitos en hechos perpetrados antes y durante la dictadura, entre ellos la segunda parte de la causa por el homicidio del ex gobernador Miguel Ragone. Unos 70 testigos declararán en el debate, en el que actuarán los fiscales Snopek y Sivila.

Diez causas que tramitaron durante la instrucción en forma separada, en las que se investigan los secuestros, torturas, desapariciones y homicidios a un total de 18 víctimas -diez de ellas, asesinadas o desaparecidas- conforman el objeto procesal del juicio por crímenes de lesa humanidad que comenzará mañana en Salta y que tiene como acusados al ex coronel y ex jefe de la Policía, Miguel Raúl Gentil; al ex coronel Virtom Modesto Mendíaz; al ex comisario general Joaquín Guil; al ex jefe del Departamento de Informaciones Policiales de Salta Antonio Saravia; al comisario general retirado Néstor Liendro, y al comisario mayor retirado Abel Guaymás. Los hechos que forman parte de cinco de los expedientes ocurrieron antes del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976.

Los jueces Federico Santiago Díaz, Mario Marcelo Juárez Almaraz y Marta Liliana Snopek, integrantes del Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Salta, comenzarán mañana con un debate que es consecuencia de la unificación por conexidad de diez investigaciones. El último de los expedientes que se incorporó, el 19 de noviembre pasado, es el denominado "Ragone II", que tiene imputados a Liendro, Guaymás y Saravia por los homicidios del gobernador Miguel Ragone y del testigo del caso, Santiago Arredes, y las heridas de la también testigo Margarita Martínez de Leal, quien fue alcanzada por una ráfaga de ametralladora durante el raid delictivo llevado a cabo en la mañana del 11 de marzo de 1976 en la vía pública de la capital provincial. La incorporación de esta causa al juicio la habían reclamado los fiscales Francisco Snopek y Juan Manuel Sivila -quienes actuarán en el debate- y de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.

El juicio comenzará mañana a las 12:00 con la lectura del resumen de los requerimientos de elevación a juicio que formularon los fiscales Snopek y Sivila. La pieza describe los casos que llegaron a juicio y las responsabilidades que la acusación atribuye a los imputados. El debate se celebrará con una audiencia por semana a partir del mediodía y se prevé que unos setenta testigos declaren ante el tribunal.

La primera de las diez causas versa sobre el secuestro y homicidio de Carlos César Martínez, quien fue desaparecido el 18 de marzo de 1976 y al día siguiente sus restos aparecieron dinamitados en una zona del Departamento La Caldera, en Salta. Por el caso están acusados Guil y Gentil.

Otro caso que llega a juicio es el homicidio de Ramón Antonio Díaz Romero y René Esteban Locascio Terán, quienes fueron atacados por policías provinciales y federales en la mañana del 20 de abril de 1975 cuando se encontraban en una vivienda de la localidad de San Lorenzo, Salta. Ambos "murieron producto de fracturas expuestas de cráneo por herida de bala", describieron los fiscales en su presentación, en la que acusaron como autores mediatos de los hechos a Gentil y Guil.

También, llegó a juicio la privación ilegal de la libertad a la que fue sometido Alfinio Elido Oroño, quien fue secuestrado en su domicilio entre el 26 y 28 de marzo de 1976 cuando salía de su domicilio. La víctima fue llevada a la jefatura de Policía, donde -según indica la acusación- fue interrogada por el acusado Guil, tras lo cual fue trasladada a un depósito de dominio del Ejército donde fue torturado mediante la sumersión de su cuerpo en agua, colgado de los pies. Su periplo continuó en el penal de Villa Las Rosas, donde recuperó la libertad tres meses más tarde. Por este caso, además de Guil, se encontraba acusado el ex jefe de la Guarnición Salta del Ejército, coronel retirado Carlos Mulhall, fallecido diez días atrás.

El juicio también cuenta en su objeto con el caso de Mario Amelunge Vargas, una víctima sobreviviente que fue secuestrada el 24 de marzo de 1976 y luego padeció las mismas condiciones a las que fue sometido Oroño, con la diferencia de que su libertad se concretó un año más tarde desde la Unidad Penal 9 de La Plata, en la provincia de Buenos Aires. Junto este caso, también llegaron a juicio los hechos que afectaron a Pablo Salomón Ríos y Nital Díaz, secuestrados el 24 de marzo de 1976, y de Ricardo Munir Falú, el 17 de mayo del mismo año. Ríos fue detenido ilegalmente en su domicilio de Cafayate y luego fue trasladado a la jefatura policial de Salta, junto con Díaz, a quien los uniformados habían ubicado en lugar de trabajo, una finca perteneciente a la bodega “Los Parrales” de la localidad de El Barrial. Los cuatro casos fueron imputados a Gentil y al fallecido Mulhall, en su carácter de autores mediatos.

Gentil también fue acusado como autor mediato en la quinta causa que integra el objeto del juicio, que aborda el secuestro y los tormentos durante los tres meses de cautiverio padecidos en la jefatura policial por Hugo Maza, privado de su libertad entre el 25 y el 27 de marzo de 1976, cuando fue ubicado en una pensión de la capital provincial.

El ex jefe policial también aparece acusado, pero como autor directo, de la privación ilegal de la libertad y la violación del domicilio de Lucrecia Eugenia Barquet, quien fue secuestrada el 2 de abril de 1976 de su domicilio, situado junto a la Brigada de Investigaciones local. La mujer permaneció nueve días en la jefatura de Policía, tras lo cual fue trasladada al penal de Villa Las Rozas. Desde allí recuperó la libertad a fines de mayo del mismo año.

En tanto, en el séptimo expediente unificado, se investiga el secuestro y desaparición de Alfredo Colqui, su esposa Lidia Telesfora Gómez y su hijo Alfredo Isidro Colqui. El procedimiento fue protagonizado por un grupo de diez personas armadas y con los rostros cubiertos que irrumpió el 9 de septiembre de 1976 en su domicilio de la capital provincial. Un día antes, el hermano de Gómez, Rolando -también desaparecido- fue secuestrado en el taller metalúrgico en el que trabajaba por policías vestidos de civil. Por los cuatro hechos, había sido imputado Mulhall y llegaron a juicio acusados Mendíaz y Guil, como autores mediatos.

Por otro lado, también llegaron a juicio los dos secuestros sufridos por Luis Obrero Destello Iñiguez Vázquez: el primero, entre el 24 de diciembre de 1974 y el 20 de marzo de 1975 y, el segundo, desde el 29 de diciembre de 1975 y hasta fines de 1976. "Durante su cautiverio fue víctima de torturas y simulacro de fusilamiento por el grupo de tareas encabezado por Joaquín Guil", precisó la Fiscalía en la acusación. Iñiguez Vazquez también fue llevado al galpón del Ejército, donde fue torturado con diferentes métodos. Además de Guil, fueron acusados por este hecho Gentil y el recientemente fallecido Mulhall, como coautores de privación ilegítima de la libertad y apremios ilegales.

Finalmente, en el juicio se abordará el caso de Rubén Yáñez Velarde, quien fue privado ilegítimamente de la libertad la noche del 8 de noviembre de 1975. Desde entonces, "no se supo nada respecto a su paradero hasta que sus restos óseos fueron identificados en el cementerio de la localidad de Yala, Provincia de Jujuy", indicó la Fiscalía, que asimismo describió que "presentaba múltiples fracturas y un impacto de proyectil de arma de fuego en el cráneo".

Gentil y Guil son los dos acusados por este hecho, en carácter de coautores mediatos de privación ilegítima de la libertad agravada y de homicidio agravado por alevosía.