23 de abril de 2024
23 de abril de 2024 | Las Noticias del Ministerio Público Fiscal
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Interviene la Unidad Fiscal especializada en crímenes del terrorismo de Estado
La Plata: juzgarán desde el viernes a una médica de la Policía por intervenir en la apropiación de una niña
Nora Raquel Manacorda llega acusada de haber falseado en 1978 los datos de la constatación de nacimiento que sirvió para que un militar de inteligencia y su esposa registraran a una niña como su hija biológica. En 2008 se determinó que es la hija de Olga Noemí Casado y Juan Oscar Cugura, asesinados durante la dictadura. El juicio se realizará con un tribunal unipersonal.

La médica Nora Raquel Manacorda, ex integrante de la Policía bonaerense, será juzgada desde este viernes en La Plata, acusada de haber inscripto datos falsos en la constatación de nacimiento de la hija de los asesinados Olga Noemí Casado y Juan Oscar Cugura. La maniobra permitió la sustitución de la identidad y la retención y el ocultamiento de la víctima durante 30 años, dado que fue registrada como hija de un militar de inteligencia y de su esposa.

El debate oral y público estará a cargo del juez Pablo Vega, integrante del Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nº1, quien actuará de forma unipersonal, de acuerdo con la ley 27.307 de fortalecimiento de los tribunales orales en lo criminal federal y de los tribunales orales en lo penal económico. Esa norma, publicada en el Boletín Oficial el 30 de diciembre pasado, establece en su artículo 9no, inciso d, que el tribunal actuará con un solo juez cuando se trate de delitos con pena máxima privativa de la libertad en abstracto que supere los seis años y no exceda de 15, salvo cuando el imputado y su abogado defensor requieran la integración colegiada, derecho que no ejerció Manacorda por sí misma o a través de su representante.

El Ministerio Público Fiscal estará representado por la Unidad Fiscal que interviene en los juicios por crímenes del terrorismo de Estado en La Plata, integrada por los fiscales generales Marcelo Molina y Hernán Schapiro, y el fiscal ad hoc Juan Martín Nogueira.

En la acusación fiscal, que será leída este viernes en el inicio del proceso, Schapiro y Nogueira señalaron que, mediante la suscripción de la constatación de nacimiento o Formulario N° 1, Manacorda "prestó una ayuda indispensable para la retención y ocultamiento de la hija recién nacida de la pareja Casado Cugura, desde el día 10 de febrero de 1978, en que se labró hasta el día 21 de agosto de 2008", fecha en que la víctima conoció su verdadero origen.

Olga Casado, madre de la víctima, era enfermera y fue secuestrada el 22 de noviembre de 1977 cuando cursaba su séptimo mes de embarazo.

Manacorda fue acusada por los delitos de retención y ocultamiento de un menor de 10 años en concurso real con los delitos de alteración del estado civil y falsedad ideológica de instrumento público. Los representantes del Ministerio Público enmarcaron el crimen en el plan sistemático de apropiación de niños y niñas ejecutado durante el terrorismo de Estado y recurrieron a jurisprudencia de tribunales internacionales para calificarlo de "forma concurrente o acumulativa" como "crimen de genocidio y delitos de lesa humanidad".

La identidad biológica de la víctima se pudo establecer luego de que la justicia federal de La Plata ordenara un allanamiento al domicilio donde vivía en Santiago del Estero, para secuestrar elementos personales que permitieran extraer material genético. El ADN obtenido fue comparado con las muestras alojadas en el Banco Nacional de Datos Genéticos. El peritaje dio como resultado que la mujer, de entonces 30 años de edad, es la hija de Olga Noemí Casado y Juan Oscar Cugura, militantes de la organización Montoneros que fueron asesinados durante la última dictadura en La Plata.

La niña fue inscripta el 2 de marzo de 1978 en una sede del Registro Provincial de las Personas en La Plata. El militar que la inscribió como hija propia, Esteban Santillán (fallecido), revistaba por entonces en el Batallón 601 de Inteligencia del Ejército. Su esposa, Celia Beatriz Ger, estuvo imputada en la causa -hasta su fallecimiento reciente- junto a Manacorda. El trámite de inscripción de la niña como hija de ambos fue posible gracias a la constatación extendida por la médica de policía.

El documento decía que la niña había nacido el 10 de febrero de aquel año en la casa 27 del barrio de suboficiales del "RI7", situada en la calle 54, entre 19 y 20, es decir, en el Regimiento 7 de Infantería de La Plata -sede de la jefatura del área militar 113, responsable de las operaciones de la represión ilegal en la zona- y en la que no había ningún centro de salud. La pertenencia de Santillán a la inteligencia castrense, la firma de Manacorda en el documento y el lugar de nacimiento fueron tres indicios que fundaron las sospechas en el comienzo de la investigación.

El documento decía que la niña había nacido el 10 de febrero de aquel año en la casa 27 del barrio de suboficiales del "RI7", situada en la calle 54, entre 19 y 20, es decir, en el Regimiento 7 de Infantería de La Plata.

Santillán actuó en Tucumán en 1975 y luego cumplió servicios en el Batallón 601 de Inteligencia bajo el mando del también fallecido coronel Alejandro Agustín Arias Duval, quien estuvo a cargo del Destacamento 101 de Inteligencia de La Plata. El centro clandestino La Cacha -donde estuvo secuestrada Olga Casado, madre de la niña- funcionaba bajo el control de esa unidad militar, que además estaba encargada de las tareas de espionaje en la región, en el marco de la represión ilegal.

El padre de la víctima, Juan Oscar Cugura, fue asesinado el 11 de octubre de 1977 durante un procedimiento realizado por personal de la Policía Federal Argentina en el marco de un raid represivo. Su cuerpo y el de Olga Casado fueron identificados por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) en tumbas sin identificar del cementerio platense, durante la investigación que lleva a cabo desde 1998 la Cámara Federal de La Plata por el derecho a la verdad.

Olga Casado era enfermera y fue secuestrada el 22 de noviembre de 1977 cuando cursaba su séptimo mes de embarazo. El procedimiento fue perpetrado en un departamento de la calle 54 N° 1271, a solo media cuadra de donde estaba situado el Regimiento 7 de Infantería.

En esa oportunidad también fueron capturadas María Teresa Calderoni -única sobreviviente-, Nora Formiga y Elena Arce, estas dos últimas también asesinadas, sepultadas como NN y luego identificadas por el EAAF. Todas fueron trasladadas al centro clandestino de detención La Cacha, ubicado junto al complejo penitenciario de Olmos, en una zona suburbana del oeste del partido de La Plata.

Por testimonios de sobrevivientes, se sabe que en enero del '78 Olga Casado fue trasladada al centro clandestino Puesto Vasco, en Quilmes, y que luego fue regresada a La Cacha.