El Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Corrientes condenó a cuatro integrantes de la cooperativa Pyramis a penas de entre 3 años de prisión -de cumplimiento en suspenso- y 4 años y 6 meses de prisión, multa y accesorias legales, por su intervención en los delitos de intermediación financiera no autorizada y lavado de activos de origen delictivo. Dispuso además el decomiso de los vehículos e inmuebles y dinero en efectivo involucrados en la investigación, que ascienden a la suma de 37.513.111,99 pesos, y multas por el doble de ese valor.

El Ministerio Público Fiscal fue representado por el fiscal general Carlos Schaefer y la auxiliar fiscal y Tamara Pourcel, junto a los responsables de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (PROCELAC), Diego Velasco y Laura Roteta, y el auxiliar fiscal Juan Argibay Molina. En el caso también intervino la Dirección General de Recupero de Activos y Decomiso de Bienes de Bienes (DGRADB), que encabeza María del Carmen Chena.

Las penas

En el marco del juicio oral, que comenzó en octubre de 2022, el fiscal general Schaefer y el auxiliar fiscal Argibay Molina habían solicitado que se condenara Rodolfo Siviero y Ana Karina Alonso -exintegrantes de la cooperativa Pyramis- a sendas penas de 4 años y 6 meses de prisión. El 13 de abril pasado, los jueces Víctor Antonio Alonso, Fermín Ceroleni y Humberto de Jesús Moreira le impusieron esa pena a Siviero como autor de intermediación financiera no autorizada y lavado de activos agravado por haberse cometido con habitualidad y en banda, realizados desde esa entidad entre 2012 y 2015. Por otra parte, se apartaron del pedido de la fiscalía y le impusieron una multa del doble de las operaciones ilícitas -que asciende a $55.800.028- y absolvieron a su pareja de los cargos por los que había llegado a juicio.

El Tribunal Oral Federal correntino homologó ayer los acuerdos de juicio abreviado ofrecidos por las defensas de los exintegrantes del Consejo de Administración de Pyramis, Mario Argentino Boschetti -consejero- y Lisandro Gabriel Boschetti -tesorero-, y del cadete Carlos Ramón Contrera.

A través de un accionar ajeno a las disposiciones del Banco Central, Pyramis habría obtenido alrededor de 68,5 millones de pesos de personas ajenas a la entidad y capitalizado más de 9,5 millones en intereses, con al menos 212 clientes confirmados. Recibía dinero de otras empresas para destinarlo a préstamos, garantizando su cobro con cheques y/o pagarés emitidos por quienes tomaban el dinero.

En tal sentido, y en línea con lo acordado en las audiencias en las que intervinieron Schaefer, la auxiliar fiscal Pourcel y los titulares de la PROCELAC, los jueces le impusieron a Mario Argentino Boschetti la misma pena y multa que a Siverio -que en su caso equivale a $12.073.375,98-, como coautor de intermediación financiera no autorizada y lavado de activos agravado por su habitualidad.

A su turno, Lisandro Boschetti y Contrera fueron condenados a tres años de prisión -de cumplimiento en suspenso-, multas de $4.908.308 y $2.244.512 respectivamente -equivalentes al doble del monto de las operaciones investigadas- accesorias legales y costas, como partícipes secundarios de intermediación financiera no autorizada y lavado de activos agravado. Además, deberán observar -por el término de dos años- las normas de conducta establecidas por el tribunal.

Los jueces dispusieron asimismo el decomiso de los automóviles, camionetas, motos, propiedades e inversiones de los cuatro hombres y del dinero en efectivo incautado durante la investigación. De acuerdo con el análisis efectuado por la DGRADB -en base a los valores de adquisición- los bienes decomisados a Siviero equivalen a la suma de 27.900.014 pesos, los de Mario Boschetti se calcularon en 6.036.687,99 pesos, mientras que los de Lisandro Boschetti ascienden a 2.454.154 pesos y los de Contrera a 1.122.256 pesos. Es decir que los bienes incautados a los cuatro condenados totalizan 37.513.111,99 pesos.

También ordenaron cancelar la personería jurídica de la Cooperativa de Créditos y Servicios Pyramis Limitada y disponer la pérdida de todos los beneficios estatales que tuviere.

El caso

De acuerdo con la investigación desarrollada por la Fiscalía Federal de Corrientes, a cargo de Flavio Ferrini, al menos desde 2012 hasta octubre de 2015, Pyramis se desempeñó como una entidad financiera bajo la apariencia jurídica de una cooperativa, a través de la cual los imputados habrían desarrollado una operatoria que consistía en la captación de fondos del público que luego eran utilizados para el otorgamiento de préstamos, descuento de cheques y operaciones cambiarias.

En el debate se determinó que Siviero y Contreras operaban desde un local dedicado a negocios inmobiliarios, en connivencia con Mario Argentino y Lisandro Boschetti, integrantes del Consejo de Administración de Pyramis, junto al gerente y socio fundacional César Octavio Gelmi, quien falleció durante el proceso.

De este modo -a través de un accionar ajeno a las disposiciones del Banco Central de la República Argentina (BCRA)-, habría obtenido alrededor de 68,5 millones de pesos de personas ajenas a la entidad y capitalizado más de 9,5 millones en intereses, con al menos 212 clientes confirmados. La cooperativa recibía dinero de otras empresas para destinarlo a préstamos, garantizando su cobro con cheques y/o pagarés emitidos por quienes tomaban el dinero.

Según la acusación, las personas imputadas en el caso introdujeron en el mercado formal el provecho económico de la intermediación financiera no autorizada. Para ello habrían utilizado maniobras de diversa naturaleza vinculadas, principalmente, con la actividad inmobiliaria, la construcción y la compraventa de automotores de alta gama, con el objetivo de dar a los fondos obtenidos ilícitamente una apariencia legal.

En el debate se determinó que Siviero y Contreras -junto a la mujer que resultó absuelta- operaban desde un local dedicado a negocios inmobiliarios, en connivencia con Mario Argentino y Lisandro Boschetti, integrantes del Consejo de Administración de la Cooperativa de Créditos y Servicios Pyramis, junto al gerente y socio fundacional César Octavio Gelmi, quien falleció durante el proceso.

Así, los jueces tuvieron por probado que Siviero captó “dinero del público por intermedio de la recepción de cheques de pago diferido en el local de Mendoza 1017, pero también en vinculación con la Cooperativa Pyramis, al participar de los negocios con esa entidad aportando capital mediante los cheques de terceros, que eran acreditados a su vez en la cuenta corriente que tenían como socios”.

Agregaron que los condenados realizaron “maniobras de intermediación financiera sin contar con autorización emitida por la autoridad del Banco Central de la República Argentina, desde el año 2012 hasta -por lo menos- el 3 de noviembre de 2015, articulando con la estructura de la Cooperativa de Crédito y Servicios Pyramis Ltda., mediante la cual generaron ingresos espurios, lo que posteriormente fue introducido en el mercado formal con habitualidad”.

Decomisos sin condena

Por otra parte, los representantes del Ministerio Público Fiscal indicaron que continúa pendiente de resolución el pedido de decomiso de los bienes del presidente de Pyramis, Horacio Boschetti, quien falleció antes del inicio del debate. En tal sentido, los bienes a incautar incluirían tres inmuebles, dos automóviles y 500.000 pesos.